La máxima reflexión
El minimal art es una de las corrientes de vanguardia que, a partir de la segunda mitad de los sesenta, centró su investigación en la reflexión sobre las estructuras del lenguaje artístico. Es un arte hecho para pensar sobre el arte; un arte, pues, de ensimismamiento máximo. Frente a la concepción tradicional de la escultura basada en la idea de estatua y en el punto de vista único, la escultura constructivista decidió desvelar la estructura interna de los objetos, hacer su radiografia; el minimal, décadas después, dio un paso todavía más radical: no sólo desvelar la estructura interna, sino la relación dialéctica del objeto con el lugar en el que está emplazado y con el uso que eventualmente puede hacer de él el espectador.Lo mínimo del minimal no debe ser simplemente entendido como lo característico de una obra con pocos elementos o reducida a sus estructuras esenciales. Es una estética, sí, económica, pero no simplificadora. Se trata de hacernos vivir y usar artísticamente el espacio. El minimal art es un movimiento que se desarrolló en los Estados Unidos durante los años sesenta y setenta y cuyos más significativos representantes fueron Robert Morris, D. Judd, C. André, Richard Serra, B. Nauman o D. Flavín.
El minimal art está relacionado con otras corrientes contemporáneas, como el arte conceptual, el arte povera y el land art, todos ellos movimientos que han pretendido desmaterializar el objeto en función de una comprensión inteligente del fenómeno artístico. Es lo que Rosalind Krauss denomina el fenómeno de ensanchamiento del campo de expresión artístico más allá del objeto.
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