Los seis países balcánicos buscan un difícil consenso en la 'cumbre' de Belgrado

"Muchas ideas y pocas decisiones". Con estas palabras definió ayer el viceministro yugoslavo de Asuntos Exteriores, Milivoje Maksic, la segunda jornada de la reunión de países balcánicos. Por primera vez en la historia, los ministros de Exteriores de los seis países balcánicos habían anunciado el miércoles su disposición a una cooperación multilateral en la región. Sin embargo, los múltiples contenciosos que enfrentan a estos países persisten y hacen muy difícil todo consenso.

Todos los participantes están en principio de acuerdo en institucionalizar los encuentros multilaterales, lo que por sí solo ya supone un éxito del encuentro de Belgrado. Tras una sesión de apertura cuajada de sorpresas positivas para el diálogo entre estos seis países tradicionalmente enfrentados, ayer los ministros de Asuntos Exteriores de Albania, Grecia, Rumanía, Bulgaria, Turquía y Yugoslavia, se centraron en la tarea más difícil: hacer cristalizar las buenas intenciones expresadas el día anterior en una agenda y objetivos concretos de cooperación multilateral entre países de sistemas diferentes y en parte opuestos.No obstante, en la cooperación concreta en cuestiones conflictivas, como son el tráfico de drogas, el terrorismo, la cooperación económica en diversos campos y el trato a las minorías, persisten las diferencias y la falta de confianza que caracteriza las relaciones entre los Estados de la región.

El terrorismo y el tráfico de drogas son problemas hacia los cuales las posturas de varios países balcánicos son muy ambivalentes. Yugoslavia y Rumaníahan tenido en los últimos años actuaciones muy dudosas en la lucha contra el terrorismo de Oriente Próximo. Belgrado dejó huir del país a dirigentes terroristas palestinos. La relación de Rumanía con el terrorismo en Oriente Próximo arroja múltiples interrogantes.

En la represión del tráfico de drogas, Bulgaria está cooperando con Occidente para frenar el flujo de heroína desde Turquía a Europa occidental. Rumanía, por el contrario, según persistentes informaciones de los servicios secretos occidentales, revende los alijos que intercepta su policía para obtener divisas.

Ayer los ministros se reunieron a puerta cerrada. El sinfín de propuestas presentadas el miércoles ha hecho necesario un replanteamiento del estado de las relaciones. Todos los participantes, excepto Albania, han invitado a reuniones en sus respectivas capitales.

La reunión concluirá hoy, según todos los indicios, con la firma de un comunicado conjunto del que aún no se conocen más datos que la ratificación de la voluntad común de continuar los contactos a alto nivel.