Policías interrogados por el espionaje al PCE se contradicen sobre sus métodos de trabajo

Cinco policías de la Brigada de Información Interior -que investigó a partidos políticos- prestaron ayer declaración ante el juez José María Vázquez Honrubia en relación con las diligencias abiertas para determinar si hubo espionaje policial al Partido Comunista de España. Dos de los agentes incurrieron en fuertes contradicciones sobre los sistemas de trabajo en la unidad, lo que "puede beneficiar a la causa", según el abogado del PCE José Luis Núñez, para quien está claro que hubo espionaje policial a partidos.

Los policías que incurrieron en claras contradicciones fueron Fernando Rivas Ortiz de Mendívil y Manuel Sanmamed, según conocedores del contenido de sus declaraciones. El primero dijo que los informes hechos en la brigada se redactaban con máquinas de escribir eléctricas y que, para obtener algunas informaciones, empleaban pequeños magnetófonos ocultos con discretos micrófonos.Sanmamed, por el contrario, insistió en que disponían de muy escasos medios y que, por ejemplo, los magnetófonos que tenían no podían emplearlos por la calle porque, al ser modelos antiguos, eran grandes y no podían ocultarse en la ropa. Este policía aseguró que, por la escasez de medios, tenían muy pocas y viejas máquinas de escribir, por supuesto convencionales.

Entre las contradicciones registradas entre ambos agentes, también figuró el hecho de que Ortiz de Mendívil aseguró que la unidad a la que pertenecían los declarantes -Sección de Movimientos Sociológicos- investigaba a movimientos verdes, extremo que negó Sanmamed.

De acuerdo con las fuentes informantes, Ortiz de Mendívil admitió que al menos en dos ocasiones empleó el magnetófono oculto, y una de ellas para descubrir datos sobre una operación de tráfico de armas. Los policías declarantes afirmaron en todo momento que ellos no investigaban a partidos políticos. Sólo uno de ellos admitió en un momento del interrogatorio que quizás hubiera alguna nota sobre partidos en los archivos.

Tráfico de armas y tabaco

Por el contrario, alguno de los policías declarantes dijo que la Sección de Movimientos Sociológicos se dedicaba a investigar asuntos como el tráfico de armas o el contrabando de tabaco a través de Galicia. Uno de los agentes señaló que, en una ocasión, se dedicaron, por ejemplo, a comprobar el nivel de fiabilidad de los sistemas de protección establecidos para el Rey, y que comprobaron que no era bueno ni adecuado.

A dos de los agentes que declararon ayer por la mañana -otros dos lo hicieron por la tarde- se les mostró el informe de 18 folios sobre el PCE que, intervenido al subcomisario Juan José Medina en 1983, está incluido en el sumario. Los dos policías negaron que el informe hubiera sido redactado en su brigada. Para insistir en este extremo, Ortiz de Mendívil explicó que estaba redactado con una máquina convencional y que ellos empleaban máquinas eléctricas.

Globalmente, según las citadas fuentes, los policías negaron la gran mayoría de las cuestiones que les fueron planteadas tanto por el juez como por Núñez y los abogados de AP y PDP, también personados en la causa.

Además de Ortiz de Mendívil y Sanmamed, por la mañana también prestó declaración el policía Leopoldo Seijas. Por la tarde, se presentaron ante el juez Manuel Jaroso y Juan Pablo Sánchez Alonso. Todos ellos se mostraron muy nerviosos y ocultaron sus rostros con periódicos. Cinco miembros de la Guardia Civil alejaron a los periodistas de los policías.