De la utopía a la 'praxis'
Los ciudadanos piden al partido en el Gobierno que resuelva problemas pretendidamente menores
Aunque el paro sigue siendo uno de los problemas que más preocupan en España, son muchos los ciudadanos de este país que con el paso del tiempo han aprendido a recortar sus aspiraciones y se limitan a pedir al partido en el poder la solución a cuestiones menores, aunque no por ello menos agobiantes. Desde la abolición del servicio militar obligatorio hasta el fortalecimiento de la infraestructura cultural del país, pasando por el mantenimiento de la utopía o simple y escuetamente más dinero para la Universidad, son algunas de estas peticiones, formuladas por personajes del mundo del espectáculo, altas jerarquías de la Iglesia o del mundo académico, literario, sindical y empresarial, en las que puede verse reflejado parte del sentir de la sociedad española.
Gonzalo Torrente Ballester, académico y escritor de 77 años, recuerda a los socialistas, desde su domicilio de Salamanca, que "no hay que perder de vista las utopías y llegar a lo posible pensando en lo imposible". "El hecho de que la solución de ciertos problemas españoles", opina el autor de Los gozos y las sombras, "no dependa del Gobierno no quiere decir que el Gobierno y el partido que lo apoya no intenten solucionarlos".Más prosaica en sus peticiones, Maribel Verdú, actriz de 17 años, reclama, superando un cierto pudor de sentirse "demasiado egoísta", que, "por favor, arreglen lo del tráfico de Madrid. Porque la M-30, antes, estaba fenomenal, y ahora está completamente atascada como cualquier calle del centro de la ciudad".
Maribel, que rueda en estos momentos la serie para televisión Juan Lobón, una coproducción hispano-alemana, a las órdenes de Enrique Brasó, reconoce que le abruma un poco plantearse otros problemas más graves, como los de la "droga y el paro" por lo que prefiere limitar la petición al tráfico.
Genocidio
Fernando Trueba, de 33 años, director de películas de éxito como Opera Prima y El año de las luces, se muestra más crítico con los socialistas, a quienes propone que en el congreso que ahora celebran dejen las ventanas abiertas, que entre aire y se despeinen".
Trueba cree "que han sido devorados por el aparato y sirven al sistema en vez de utilizarlo"."La verdad es que les encuentro como disecados y sin vida", opina. "Ni siquiera me atrevo a pedirles que resuelvan problemas tan graves como es el del paro, por ejemplo, pero sí podrían conseguir la abolición del servicio militar obligatorio, porque lo que están haciendo es perpetuar una especie de genocidio que es robar un año de sus vidas al 50% de la población joven".
También las peticiones del director de la revista Sur Exprés, Borja Casani, revelan un trasfondo de crítica. Borja Casani, más que pedir, "la verdad, casi, exigiría", explica, "a los socialistas que se dediquen más a promover la infraestructura cultural", a asegurar ese terreno de juego imprescindible, "para que funcione la iniciativa privada en el mundo cultural en vez de practicar el intervencionismo más descarado".
Por el contrario, la Iglesia española parece reclamar mayor atención, a juzgar por las palabras que dirige al PSOE con ocasión de su 31º congreso el secretario de la Conferencia Episcopal, Fernando Sebastián, para quien sería "especialmente deseable" que "este congreso contribuyera a que los valores de la religión y de la moral católica sean apreciados como factores positivos y dignos de respeto dentro de la vida social española". Sebastián añade que "desde el punto de vista de la Iglesia, será bienvenido cuanto se haga por la igualdad y la solidaridad de todos sin ninguna discriminación de tipo político, ideológico o religioso".
El rector de la universidad Complutense de Madrid, Gustavo Villapalos, pide, pisando tierra firme, "más atención" y "más dinero" para resolver los problemas de la Universidad española; "los próximos tres cursos tendremos los COU más numerosos de la historia", añade el rector, "de manera que lo que podemos pedir a los delegados socialistas, es
que el tema de la Universidad se convierta en la, estrella de los debates del congreso". Mientras que el líder del Sindicato de Estudiantes, pese a insistir en su preocupación por los jóvenes, se limita a expresar, con la convicción (le que su deseo no se verá cumplido, que "sería deseable, aunque no parece -probable, que el 312 congrese del *PSOE tuviera como resultado un cambio de política que hiciera posible un gobierno PSOE que -tomara medidas auténticamente socialistas en beneficio de la clase trabajadora y la juventud., sectores en los que basó su apoyo electoral".
Algo parecido opina Antonio Gutiérrez, de -3,6 affi.os, actual secretario general de Comisiones Obreras. "Lo prioritario es cambiar una política que ha aumentado las desigualdades sociales y que, desde el punto de vista económico, se ha demostrado ineficaz". Cree GuiJérrez que la opinión pública española pediría a la cúpula del partido socialista, si pudiera hacerlo, "que no justifique con teorías estrafalarias los desagaisados que ha cometido a lo largo de cirizo aflos". Uno de estos "desagL.isad.os" es para Gutiérrez, sin duda ninguna, el que ha propiciado que el paro afecte a tres millones de personas en nuestro país.
Crear empleo
Curiosamente, también un representante del mundo empresarial, como es Juan Jiménez Aguilar, secretario de la CEOE (Cofederación Española de Organizaciones Empresañides), opina que la petición clave a dirigir al partido en el Gobierw se refiere a esta última cuestión. "Creo que el problema de EspañIL es el del empleo, 3, dentro de eLlo, el del empleo jiivenil". l'ara resolver esta cuestión, "es necesaria", dice Jiméne2: Aguilar, "una concertación que tenga como objetivo la creación de eripresas y, consiguientemente, cte puestos laborales. Es necesaria también mayor inversión tanto pública como privada para forrientar la creación de empleo".
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