Peligro de derrumbamiento del muro de contención del Ebro a su paso por Zaragoza

Un tramo de 70 metros de longitud del muro de contención del río Ebro a su paso por la ciudad de Zaragoza permanece hundido en su estructura y resquebrajado, con peligro de derrumbe total, desde el pasado 20 de diciembre.

Mientras, las instituciones públicas, Ayuntamiento de la ciudad, Gobierno autónomo aragonés y la Confederación Hidrográfica del Ebro han entablado una polémica acerca de quién tiene la competencia de arreglar dicho muro.Los vecinos del Actur, barrio que podría verse afectado en caso de avenidas del río Ebro, se han movilizado y reclaman una solución. El domingo han anunciado que colocarán mesas para recoger firmas a fin de que las instituciones se pongan de acuerdo y solucionen el problema del muro.

Los servicios técnicos del Ayuntamiento han realizado un informe en el que se aprecia "la imposibilidad de una recuperación de la parte dañada del muro". Han detectado también que la zona afectada presenta una situación de inestabilidad que "puede concluir con el vuelco total hacia el río, lo que dejaría a la margen izquierda desprotegida y expuesta a la agresión de las aguas".

La primitiva obra del muro fue ejecutada, según dicho informe municipal, por el Estado, a través de la Confederación Hidrográfica del Ebro, a solicitud y con participación económica del Ayuntamiento, entre los años 1962 y 1965, con motivo de unas riadas.

El alcalde, el socialista Antonio González Triviño, se ha dirigido al presidente aragonés, Hipólito Gómez de las Roces, y al presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Eugenio Nadal, a quienes pide que, "a la vista del riesgo que supone para una parte de la ciudad esta situación, se adopten las medidas necesarias para una urgente reparación del muro".