El crecimiento de la economía española se verá afectado por factores exteriores
La situación económica internacional, en "fase descendente" desde 1984 y agravada por el crash bursátil del pasado mes de octubre, arroja una serie de incógnitas sobre el potencial de crecimiento de la economía española para 1988, según se desprende del análisis realizado por el anterior ministro de Economía y Hacienda y actual presidente del Banco Exterior, Miguel Boyer, en el último número del semanario El Globo.De acuerdo con el análisis realizado por Boyer, el origen de la contracción en el crecimiento económico mundial era ya perceptible antes de la crisis de los mercados bursátiles, como consecuencia de las políticas económicas derivadas de la situación norteamericana y de la recorte en los niveles de inversión privada. A esta situación ha venido a sumarse el crash bursátil, cuyos efectos son tildados de "nefastos" por Boyer. Este conjunto de datos introducen una serie de interrogantes sobre el crecimiento futuro de la economía española, en su "año más brillante" desde 1974.
A juicio de Boyer, y con la excepción de la evolución en las tasa de paro, "difícilmente puede encontrarse en el contexto europeo un cuadro macroeconómico más satisfactorio que el de la economía española en 1987", que se verá ahora atenuado por los efectos del contexto internacional.
