El Rey pide a Soares que los actos del V Centenario se hagan de forma coordinada

El rey Juan Carlos y el presidente de la República Portuguesa, Mario Soares, destacaron ayer la necesidad de "sepultar en el olvido" cualquier sentimiento de distancia entre los dos países ibéricos. Los dos jefes de Estado hablaron ayer de la deseable coordinación de esfuerzos para contribuir a la unidad de Europa, sin olvidar los lazos recíprocos con Africa y América Latina. El monarca español, por su parte, pidió a Soares, que ayer inició una visita oficial de seis días a España, que las celebraciones del V Centenario del Descubrimiento de América se hagan "de forma coordinada".

Mario Soares llegó a mediodía de ayer a Madrid, en su primera visita oficial a nuestro país como presidente de la República portuguesa, acompañado de un numeroso séquito de más de 70 personas, entre los que se encuentran el ex presidente Antonio de Spínola, el ex primer ministro Francisco Pinto Balsemao, representantes de todos los partidos parlamentarios, de la literatura, de las artes y de la empresa portuguesas.Soares, que se aloja en el palacio de El Pardo, almorzó ayer en privado con el Rey y se entrevistó, durante más de una hora, con el presidente del Gobierno, Felipe González, a quien calificó de "amigo desde hace 15 años".

En este encuentro se trataron básicamente, según fuentes de la Moncloa, temas multilaterales, de manera especial la coordinación de ambos países ante el proceso de integración europea. Por su parte, los ministros de Asuntos Exteriores de los dos países, que encabezaron un almuerzo a la delegación portuguesa en el palacio de Viana, también se centraron en el proceso de unidad europea y en las perspectiva de una acción común ante la próxima cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad Europea en Bruselas, el próximo mes de febrero.

Por la noche, en la cena de gala ofrecida por los Reyes, don Juan Carlos insistió en que Portugal y España, "cada uno con sus particularidades y sus señas de identidad propias, caminan sin miedos, sin prejuicios, hacia la unidad de Europa".

El presidente portugués, por su parte, recalcó que "la unidad política europea no es incompatible con el mantenimiento de los lazos que tradicionalmente nos unen a los pueblos de África, de América Latina y de Asia", e hizo especial mención a la necesidad de ayudar a las democracias latinoamericanas, de manera señalada a las centroamericanas.

El programa de la visita del presidente portugués, calificada por él mismo como una "ofensiva de imagen, para dar a conocer el nuevo Portugal", incluye desplazamientos a Salamanca, donde será nombrado doctor honoris causa por la universidad, a Barcelona, donde se entrevistará con el presidente de la Generalitat, y a Sevilla.