El dinero empieza a estar inquieto

La baja de esta última sesión no ha sorprendido a nadie en los mercados de valores, pues obedece a la actuación de la inversión a corto plazo dentro del más clásico de estos movimientos, el ciclo semanal. Las expectativas que había despertado la publicación de las cifras del déficit comercial norteamericano encontraron una buena justificación en la respuesta de Wall Street y se dedicaron a imitarla. La jornada confirmaba así el cambio operado en el mercado a lo largo de la semana, al darse un nivel de intercambio más alto que el que venía siendo habitual. La presencia de dinero es un hecho indiscutible, aunque aún impide fijar plazos de actuación, que ha permitido mejorar e¡ ambiente, al tiempo que despierta cierta inquietud entre los habituales, pues sin incidir abiertamente en la trayectoria del mercado si que muestra síntomas de variación.El cambio de decorado, potenciado por algunos valores bancarios, ha terminado por afectar a la mayor parte de los sectores, si bien en menor grado, y el volumen negociado se ha visto incrementado en términos generales, aunque también en esta ocasión es el sector bancario el que se lleva la mejor parte del pastel.

La sesión abrió con fuertes bajas en el grupo de valores de automoción, aunque pronto las eléctricas corrigieron esa tendencia con bajas más moderadas. El sector bancario mantuvo la trayectoria negativa iniciada el jueves, con una presencia mayoritaria de órdenes de venta y abundancia de repeticiones. El nivel del negocio descendió en este sector, al igual que en el resto del mercado, al cubrirse en tomo al 50% de la oferta en la mayoría de ocasiones.

Las posiciones al c¡erre mostraban cierto interés de los inversores por situarse en el mercado, aunque el papel seguía cubriendo la mayor parte de la demanda que se generaba fuera de hora.