Chirac convoca a los partidos franceses para buscar un consenso sobre su financiación

Representantes de todos los partidos parlamentarios franceses mantuvieron ayer durante dos horas y cuarto una reunión con el primer ministro Jacques Chirac, para tratar un tema insólito en la historia de la V República, como es la financiación de las campañas electorales y de los partidos políticos.La reunión fue convocada después de que el presidente de la República, François Mitterrand, subrayara la urgencia de un problema que ha sido objeto en los últimos años de trece proyectos de ley y de trece fracasos.

La guerra de los escándalos entre derecha e izquierda ha puesto en primer plano la cuestión subyacente en numerosas corrupciones y fraudes: las fuentes irregulares de financiación de las campañas electorales y de los partidos.

Alrededor de una mesa redonda, en el salón rojo del palacio de Matignon, se sentaron Jean-Marie Le Pen por el Frente Nacional, Georges Marchais por el Partido Comunista, Lionel Jospin por el Partido Socialista, Jean Lecanuet por la coalición Unión para la Democracia Francesa y Jacques Toubon por el RPR (Asamblea para la República), además de Jacques Chirac y de un alto funcionario.

Para evitar que destacara el carácter insólito de la reunión, los servicios del primer ministro impidieron la realización de fotografías de los cinco dirigentes reunidos con Chirac. Nunca en la V República se había producido una reunión de este tipo ni se había planteado el consenso entre todos los partidos para legislar en la materia. Dos candidatos a la presidencia de la República, que no cuentan con grupo parlamentario propio, no pudieron participar en la reunión, a la que no habían sido invitados. Se trata del comunista renovador Pierre Juquin y del candidato de los verdes, Antoine Wechter.

Puntos de acuerdo

El clima de la reunión fue "cortés, aunque frío al principio", según Jospin. Algunos puntos de acuerdo surgieron respecto a la limitación de los gastos electorales y al control del patrimonio y de las ganancias de los políticos, desde los alcaldes hasta el presidente de la República. La financiación de los partidos políticos, en cambio, es la cuestión que suscita mayores divisiones. En una próxima reunión los dirigentes políticos intentarán ultimar el acuerdo sobre los puntos en los que existe ya consenso.El propósito de Chirac es llegar a un acuerdo antes de fin de año, para someter la nueva legislación a la aprobación del Parlamento en enero en una sesión extraordinaria, con el objetivo de entrar en la campaña electoral para la elección presidencial con unas reglas de juego ya fijadas. La campaña para la elección del presidente de la República ha sido evaluada en unos 200 millones de francos (4.000 millones de pesetas).