Los propietarios de Cabañeros alegan que sólo la parte de Defensa debe ser parque natural
Los propietarios de partes de la finca de Cabañeros que han presentado alegaciones contra el proyecto de la Junta de Castilla-La Mancha de crear un parque natural en la zona aducen, como norma general, que los límites para crear ese parque deben afectar sólo a la parte adquirida por el Ministerio de Defensa, ya que es en esa área, y no en el resto, donde está concentrada la mayor riqueza ecológica.
La familia Aznar, que vendió al Ministerio de Defensa gran parte de la finca pero mantiene en su poder unas 7.000 hectáreas, alega en su escrito que los nidos de cigüeñas y buitres negros que deben protegerse están en esa zona vendida a Defensa, y no en las otras 7.000 hectáreas que también están comprendidas en la propuesta de declaración de parque natural.Por eso, los Aznar proponen, de un lado, que sean modificados los límites del posible futuro parque y, de otro, que la zona definitivamente seleccionada no sólo sea declarada parque natural -que no impelaria el acceso de las personas-, sino que sea considerada reserva integral para una mayor protección de los buitres negros.
"La declaración de parque natural no nos parece el medio más adecuado para proteger los valores ecológicos de las fincas qtie representamos", dice en la primera de las alegaciones la firma que represéntalos intereses de los Aznar.
En otra parte del informe se indica: "Los mismos técnicos del Icona que nos trajeron de la mano al Ejército del Aire son los que, hoy en día, se encuentran al servicio de la Consejería de Agricultura en puestos de mayor responsabilidad y los que, ahora, por lo menos alguno de ellos, han firmado e informado el expediente de parque natural".
En el mismo escrito de alega se señala que la Junta de Castilla-La Mancha no ha difundido cuáles serán las indemnizaciones que deberán darse a los propietarios afectados. "Dejan a los propietarios de las fincas en la más absoluta inseguridad jurí dica".
Concluye el plazo
Hasta la jornada de ayer -el plazo concluye a las siete de la tarde de hoy-, eran cinco las personas flisicas o jurídicas que habían presentado escritos de alegaciones al proyecto. Se trata de la Inmobiliaria El Bullaque, que gestiona los bienes de los Aznar en la zona; el propietario Antonio Biosca Carbonell; Esther Koplovitz Jueseu; la Sociedad Española de Ornitología, y la Coordinadora para la Defensa de las Aves (Coda), informa desde Toledo Luisa Acedo.Biosca Carbonell, residente en Madrid, señala en su alegación que también deben ser modificados los límites propuestos por la Junta de Castilla-La Mancha para el parque natural, y que en la actualidad comprende parte de la finca La Gargantilla, propiedad de Biosca.
Entre las alegaciones presentadas, también se hace constar que la Junta de Castilla-La Mancha no ha hecho un estudio serio y riguroso para la creación del previsto parque natural.
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