Las ofertas de Washington son ya muy limitadas

Los negociadores españoles "no esperan gran cosa" de la próxima ronda negociadora con EE UU para la reducción de tropas, que se celebrará a mediados de diciembre en Madrid. Aparentemente,la parte americana, que guarda un total mutismo al respecto, "no tiene otra cosa que ofrecer" tras haber sugerido que podría retirar el 30%. de sus aviones F-16 de Torrejón, es decir, 24 aparatos, según aseguran las fuentes españolas consultadas.Antes de la octava ronda,existen "dos oportunidades piara que se den contactos", a nivel ministerial, entre España y EE UU: la reunión del Comité de Planes de Defensa de la OTAN, en Bruselas, a la que aisistirá Narcís Serra, y también el nuevo secretario de Defensa norteamericano, Frank Carlucci -quien parece que adquirirá protagonismo en la negociación con España-, y la reunión del Consejo Atlántico -en la que pueden entrevistarse Francisco Fernández Ordóñez y George Shultz-, ambas a principios de diciembre.

El Gobierno cree que Washington aguardará "hasta el último momento" antes de ceder, pero que, finalmente, aceptará la salida de todos los F-16 de Torrejón, "porque no tienen otro remedio". Una vez producida esta aceptación, cabría la posibilidad de prolongar la negociación de los nuevos convenios hasta más allá del próximo 14 de mayo, fecha en la que, teóricamente, comenzaría a contar el plazo de un año para el desmantelamiento de las instalaciones norteamericanas, si para entonces no existiese un nuevo convenio ratificado por las Cortes.

Fuentes del palacio de Santa Cruz recordaron que, en cualquier caso, no habrá nuevos convenios que sustituyan al ahora vigente hasta que no se alcance un pleno acuerdo para la reducción de las tropas norteamericanas. Responsables de la diplomacia española recalcaron que en el futuro el espíritu que presidirá cualquier texto que recoja las relaciones jurídicas de amistad y cooperación con Estados Unidos será "muy diferente" del que regía hasta ahora.

"No puede mantenerse la idea de que concedemos unas bases militares a cambio de ayuda; no pedimos dinero, sino que la presencia militar norteamericana en España se derive de nuestra voluntad soberana de contribuir a la causa aliada", dijo un alto cargo del Ministerio de Asuntoas Exteriores. Por ello, los textos que sustituyan al actual convenio no incluirán mención expresa a contrapartidas económicas por el mantenimiento de las facilidades a EE UU en territorio español.

Las mismas fuentes expresaron su confianza en que, "más tarde o más temprano", Washington acabe cediendo a las pretensiones españolas para que los 72 aviones F-16 estacionados en Torrejón y los aviones cisterna de Zaragoza abandonen el territorio nacional. "La fecha tope para llegar a un p acuerdo sobre la reducción de tropas será, como máximo, a mediados de abril, de manera que, a partir de entonces, se pueda negociar el nuevo convenio, o los nuevos convenios, sustitutos del suscrito en 1982", dijo un diplomático consultado por este periódico.