Jane Weinberger niega que su salud cause la dimisión del jefe del Pentágono
Jane Weinberger confirmó ayer que su marido abandona el Departamento de Defensa norteamericano, pero negó que su salud sea la causante de esta dimisión.Caspar Weinberger y su esposa se encuentran actualmente en Monterey (California), donde el jefe del Pentágono asiste a la reunión del Grupo de Planes Nucleares (NPG) de la OTAN.
"Llevo diciéndoselo ocho años", dijo Jane Weinberger, que se confesó "encantada" de que su marido deje el Gobierno y pase más tiempo en casa.
Con un alto grado de optimismo, la esposa del secretario de Defensa restó importancia a haber sufrido el verano pasado una histerotomía para extirparle un cáncer de útero, a la que siguieron seis semanas de radiaciones; a la reciente ruptura de dos vértebras dorsales y a los problemas que sufre en una rodilla desde hace un año.
"Después de los 60 años, una se vuelve un poco achacosa", señaló Jane Weinberger, que cuenta 69 años de edad.
Desde que el matrimonio se trasladó a vivir a Washington, en 1970, al ser nombrado Caspar Weinberger secretario de Salud, Educación y Bienestar Social de la Administración de Nixon, Jane Weinberger ha brillado por su ausencia en los actos sociales de la capital federal a los que asistía su marido, pero ha sido muy activa en la búsqueda de fondos para diferentes instituciones, como el Museo Infantil de Washington y la Biblioteca Folger Shakespeare.
El considerado como el más fiel halcón del presidente Ronald Reagan es el secretario de Defensa que más tiempo ha permanecido en el cargo, después de Robert McNamara. Jane Weinberger asegura que su marido no ha tenido nunca pretensiones de establecer una marca de longevidad. "Ha permanecido el tiempo que consideró que era útil. Varias veces quiso dejarlo, pero siempre parecía que el momento no era el oportuno", añadió.
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