Leguina pide a los grupos políticos que repriman la tentación de dejar al PSOE en minoría
El presidente de la comunidad, Joaquín Leguina, abrió ayer el debate sobre el estado de la región con un reto a los grupos de la oposición: que resistan la "fuerte tentación" de dejar al PSOE en minoría y que participen en la labor del Gobierno regional. Alianza Popular, el CDS e IU no se dieron por aludidos y guardan sus cartas a la espera de la segunda parte del debate, que se celebra hoy. Los grupos políticos afirmaron que la falta de datos sobre los presupuestos impide saber lo que hay detrás de las propuestas de Leguina.
El presidente regional no deja de darle vueltas a las posibilidades de gobernar en minoría. Ayer mismo cogió la calculadora y llegó a una sorprendente conclusión: existen nada menos que 256 variaciones posibles en cualquier votación de la Cámara regional, al combinar los cuatro grupos parlamentarios y las cuatro posibilidades de voto. Y eso sin tener en cuenta una quinta modalidad, el no voto, introducida por los socialistas para pronunciarse en el último pleno sobre el desmantelamiento de la base de Torrejón.Leguina recordó que las "posturas testimoniales" ajenas a las competencias de la Asamblea de Madrid no sirven más que para "malgastar una pólvora política que vamos a necesitar para otros fines".
El presidente señaló que la Comunidad es algo más que " un buen escaparate" y pidió " mayor participación y corresponsabilidad" a la oposición. "Dejar en minoría al grupo socialista en esta Cámara es cosa facilísima, y no tiene, por tanto, especial mérito".
Lo que vino a continuación fue una segunda versión del discurso de investidura del mes de julio con algunas ofertas más concretas. Leguina habló de la existencia de dos síndromes -"Madrid, distrito federal" y "Comunidad, diputación provincial"- para explicar la tendencia a separar la ciudad de su entorno regional.
RTV Madrid
Más concreto estuvo al hablar de RTV Madrid. El presidente afirmó que el Gobierno regional no va a entorpecer la puesta en marcha del tercer canal y que aceptará como director del ente público a la persona propuesta por el consejo de administración (el PSOE cuenta con tres representantes, el mismo número que AP, frente a los dos del CDS y uno de IU). Eso sí, el PSOE exigirá un "alto consenso" de los grupos.La situación económica y el paro merecieron más de la mitad de la hora y media que duró el discurso. Tras una larga radiografía de la situación regional que despertó más de un bostezo, Leguina criticó la precipitación con que ha sido presentado - el proyecto de ley del CDS para crear el Consejo Económico y Social y afirmó que antes sería necesario conversar con las fuerzas sociales interesadas.
Después de trazar un perfil alentador del despegue económico de la región en los último meses, el presidente reconoció que el paro sigue siendo la asignatura pendiente: el 40% de los jóvenes madrileños está sin trabajo. El presidente anunció que antes de 1988 estará acabado el plan regional de empleo.
El transporte y la vivienda no podían faltar en la intervención. Los nuevos accesos al aeropuerto de Barajas y la prolongación del metro hasta Vallecas se dieron la mano con el plan cuatrienal de viviendas o con la construcción de 3.500 pisos anuales de promoción pública en régimen de alquiler.
El discurso estaba ya en su declive cuando el presidente dijo que la comunidad dispondrá de 100 profesionales de la seguridad en sus edificios. Algunos diputados saltaron de sus escaños y se preguntaron si eso significaba la creación de un cuerpo de ertzainas madrileños. Tras su intervención, Leguina precisó que esos puestos serán cubiertos por la Policía Municipal de Madrid.
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