El Ayuntamiento dificulta la investigación sobre Almacenes Arias, según Javier Soto
Javier Soto, concejal del Centro Democrático y Social y presidente de la comisión de seguridad que estudia el incendio de los Almacenes Arias, denunció ayer que la comisión está encontrando dificultades, dentro del propio Ayuntamiento, para citar a varios de los bomberos presentes en las primeras horas del siniestro, y afirmó que si las comparecencias previstas no se producen el próximo jueves solicitará la declaración de todos y cada uno de los 70 bomberos que estaban ese día de servicio.
"O no funcionan los servicios o hay una mano negra en este tema", dijo Soto. "Es muy penoso que la comisión, en plena reunión, haya tenido que ordenar la localización urgente de bomberos que desconocían haber sido llamados a declarar 10 días antes. Además es curioso que sean estos bomberos los que en sus declaraciones han aportado una gran cantidad de datos desconocidos o que contradicen la versión que se tenía"."Estoy dispuesto a llegar hasta el final, y eso significa que si algunos bomberos de los que hemos llamado a declarar no son localizados para el jueves, me voy a plantear seriamente el llamar a todos los que estaban de servicio, aunque ello suponga la prolongación de los trabajos de la comisión un mes más", dijo Soto.
"Me he tenido que quejar personalmente al alcalde, y Barranco ha tenido que dar órdenes para que se atiendan todos los deseos de la comisión. La semana pasada, y tras la acusación de las centrales sindicales de que la investigación se estaba desarrollando de una forma incompleta, se hizo un llamamiento para que todos aquellos ciudadanos que supieran algo pudieran acudir. Pues bien, nos están llegando informaciones de bomberos que quieren declarar, pero no se atreven ante posibles represalias, como la congelación de su promoción profesional", afirmó el presidente de la comisión.
Según Soto, los problemas comenzaron cuando acabaron las comparecencias de los jefes de los servicios municipales. "No sabíamos los nombres de los que habían participado en los primeros momentos, y sus jefes afirmaban no recordar quiénes estaban en el incendio, con argumentos tales como que estaba muy oscuro o había mucho humo. Enrique Villoria, de Alianza Popular, propuso entonces que se llamara a un bombero de cada una de las cuatro primeras dotaciones que habían llegado, y de ello se ocupó la Concejalía de Seguridad. Todos se presentaron a la hora a la que estaban citados, y en sus declaraciones abundaron las respuestas de no sabe, no contesta".
"Sin embargo", dijo Soto, "cuando de nuestras investigaciones obtuvimos algunos nombres y quisimos llamarles surgieron los problemas, y o bien les llegó muy tarde la convocatoria o no les llegó".
Javier Soto no se atrevió ayer a dar una fecha de terminación de los trabajos, pues ello dependerá del número de bomberos que comparezcan el próximo jueves. "Hasta ahora teníamos muchas declaraciones en las que se achacaba a la fatalidad el siniestro y sus consecuencias, pero en las últimas reuniones han comenzado a recibirse declaraciones en las que, aun reconociendo la fatalidad, se afirma que el desastre podía haberse prevenido. Es por eso por lo que la investigación no estará cerrada hasta que se escuche a todos los que puedan aportar algo".
