Dos personas apuñalan a un soldado por no llevar tabaco
José Sánchez Cuesta, de 20 años, fue apuñalado el sábado por dos desconocidos en la calle de Alemania, de la localidad de Fuenlabrada. El joven, que está haciendo el servicio militar, acompañó a su novia hasta su casa, momento en el que se les acercaron dos desconocidos para pedirles tabaco. El joven respondió que no tenía y, sin mediar palabra, le asestaron cinco puñaladas. El herido está ingresado en el hospital Gómez Ulla.
El soldado salió de cumplir una guardia el sábado por la mañana y pasó el día por Madrid con su novia. Alrededor de las 20.30, la pareja pasó por el domicilio de los padres del muchacho para dejar la ropa de militar. El muchacho acompañó después a su novia hasta su casa, situada en la localidad madrileña de Fuenlabrada.Alrededor de las 22.30, cuando ambos estaban en el portal despidiéndose, se acercaron dos desconocidos y les pidieron tabaco. La pareja respondió que no tenía, y los dos asaltantes sacaron sendas navajas, según declaró su novia a la policía. Instantes después, y sin que mediara nigún tipo de provocación por parte de la pareja, era apuñalado el soldado.
Los agresores se dieron a la fuga inmediatamente y aún no han sido detenidos, según aseguró ayer un portavoz de la Jefatura Superior de Policía.
El herido fue trasladado por el padre de la chica al ambulatorio de Fuanlabrada, donde se le practicó una primera cura. Posteriormente se trasladó al soldado al hospital militar Gómez Ulla, donde quedó ingresado. Su estado fue calificado por los médicos como de pronóstico reservado. Presenta heridas en el muslo, en la zona lumbar y en el hipocondrio derecho. Dado el estado en que se encontraba el herido, no se le pudo tomar declaración.
"Iban drogados"
"Los agresores debían estar drogados", aseguró ayer la madre del joven, "porque casi no tenían fuerza. Las cinco puñaladas son poco profundas y no le han afectado a órganos vitales".El soldado es el segundo de cuatro hermanos. Poco antes de incorporarse al Ejército para realizar el servicio militar trabajaba en la empresa Dormilón, dedicada a la fabricación de colchones.
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