Íñigo Cotoner, hijo del marqués de Mondéjar, entra en el Consejo el de Administración de Renta Inmobiliaria, del Grupo Interpart
Íñigo Cotoner Martos, conde de Tendilla e hijo del marqués de Mondéjar, jefe de la Casa Real española, ha fichado por el grupo Interpart, que preside Giancarlo Parretti, y entrará a formar parte del Consejo de Administración de Renta Inmobiliaria, la sociedad adquirida por el binomio Interpart-SASEA al Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) hace escasos meses. La vinculación de Íñigo Cotoner con el grupo que dirige Parretti es considerada una excelente baza táctica para un empresario que, con crecientes intereses en España, necesita establecer lazos con el establishment español.Con el conde de Tendilla formarán en el consejo de Renta Inmobiliaria Jesús de Ramón Laca, secretario general de R. J. Reynolds Tobacco España, SA, economista del Estado y ex secretario general técnico de Hacienda con García Añoveros: además de Giancarlo Parretti, presidente de Interpart, y Florio Fiorini, de la Société Anonyme Suisse d'Exploitation Agricole (SASEA), y Juan Antonio Robles, ex director financiero y de gestión de activos del FGD, que ha pasado a ocupar además la presidencia de Renta, puesto que ya había desempeñado cuando la sociedad inmobiliaria pertenecía al Fondo. El puesto de secretario del consejo estará ocupado por Emilio de Palacios, uno de los tres administradores nombrados por el FGD en el caso de Banca Catalana.
Un socialista capitalista
Giancarlo Parretti, un hombre de azarosa vida por distintos países europeos, que ha conocido la cárcel en Italia -como él mismo se encarga de aclarar, a la menor insinuación, con cierto timbre de orgullo-, un "socialista convertido en capitalista" -como también él mismo recalca-, parece haber encontrado en España su definitivo acomodo. Parretti está a punto de adquirir una lujosa residencia, sede de una antigua embajada, en la calle de Montesquinza de Madrid, todo lo cual abona la idea de que este siciliano de fino olfato para los negocios se va a convertir en un protagonista estable del mundo de los negocios españoles.El grupo que preside, Interpart, en unión de su socio, la SASEA de Fiorini, ha realizado operaciones espectaculares, como la compra del grupo Meliá (revendido días atrás, en su mayor parte, a la Cadena Hotelera Sol, de Gabriel Escarrer), la de Renta Inmobiliaria y la del llamado pleíto Coca. Toda la trayectoria de Giancarlo Parretti está muy ligada a la crisis del Banco Español de Crédito y la llegada de José María López de Letona como máximo ejecutivo del mismo. De hecho, la habilidad de Parretti parece haberle convertido en el mejor de los bomberos posibles para liberar a Letona de todos los problemas heredados en Banesto.
La propia Renta acaba de anunciar la realización de una importante ampliación de capital por importe de casi 18.000 millones de pesetas, ampliación que parece orientada a abordar la futura solución del caso Coca. La operación Renta, en cualquier caso, va a convertirse en un excelente negocio para Parretti si necesidad de tal ampliación y con sólo atender el futuro de ese cuatro millones de acciones de capital, equivalentes a 2.000 millones de pesetas, que están en la autocartera de la sociedad.
En 1981, la sociedad efectuó un acopio de acciones propia para tratar de evitar una caída de la cotización en bolsa, al mismo tiempo que se autorizó al consejo de administración para efectuar una reducción del capital a su conveniencia. Ahora, el nuevo consejo de Renta Inmobiliaria s va a plantear la posibilidad el vender dicha autocartera, aun que "siempre en condiciones que no perturbe la cotización del valor", en palabras de una fuente del grupo. Esa autocartera, a tenor de la actual cotización en bolsa de las acciones de Renta equivale a más de 12.000 millones de pesetas.
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