El calzado perdió 25,000 empleos 'oficiales' en cinco años

El sector del calzado perdió en los últimos cinco años 25.000 puestos de trabajo oficiales, que en su mayor parte pasaron a engrosar la economía sumergida. El coste de esta reconversión salvaje del sector ronda los 80.000 millones de pesetas, según un estudio realizado por la Federación de Textil-piel de CC OO. Esta cifra es considerada muy abultada por la patronal del sector, que, no obstante, coincide con las centrales sindicales en que, de haberse realizado una reconversión programada, el coste social y laboral hubiese sido sensiblemente menor. Los sindicatos reclaman, por otra parte, una modificación de la actual legislación sobre sociedades, para impedir los cierres incontrolados y el aumento de las industrias clandestinas.

El sector del calzado español ha pasado de tener 56.000 trabajadores oficiales en 1981 a 31.000 a finales del pasado año. Estas cifras, manejadas por sindicatos y patronal, sólo sirven a modo orientativo para conocer la evolución del trabajo legal, puesto que se admite por ambas partes que los 25.000 trabajadores de menos que tiene el calzado han pasado en su mayoría a engrosar las filas de la economía sumergida, que, según diversas estimaciones, representa el 40% de la producción zapatera española. "Estos 25.000 trabajadores han cobrado en su mayoría las indemnizaciones por despido del Fondo de Garantía Salarial, al declararse insolventes sus empresas", explicó a este periódico Pascual Pascual Morales, miembro de la ejecutiva federal de textil-piel de CC OO.

"Si a estas cantidades unimos las deudas a la Seguridad Social que estas empresas dejaron sin pagar al cerrar y las cantidades que los despedidos cobran del desempleo, tenemos que esta reconversión salvaje del sector ha costado unos 80.000 millones de pesetas", añadió el dirigente sindical.

Pascual Pascual contrasta esta cifra con los 18.000 millones que la Administración pensaba destinar al sector en el Plan de Intangibles, que no se llegó a aplicar el pasado año, y los 9.500 previstos en el Plan de Promoción de Calidad, Diseño y Moda, de los que la mitad serán para el calzado.

"De haberse aplicado desde el primer momento las ayudas a la pequeña y mediana empresa y otras medidas que planteamos, en lugar de dejar que cada cual hiciera la reconversión por su cuenta, no sólo se hubiera ahorrado la mayor parte de esos 80.000 millones, sino que también se habría cortado ese interminable goteo de trabajadores hacia la economía sumergida", opina Pascual.

Cifra abultada

La patronal del sector considera muy abultada la cifra dada por CC OO, aunque comparte el criterio de que una reconversión programada hubiera reducido las consecuencias económicas y sociales. "Es incomprensible", señala Rafael Bernabéu, presidente de la Federación de Industriales del Calzado Español (FICE), "que, mientras se prima cada vez más la creación de nuevos puestos de trabajo, no se haga nada para aliviar las cargas, que aumentan día a día, de las industrias que llevan muchos años funcionando. El índice de cotización a la Seguridad Social ha bajado, pero en cambio nos suben la base de cotización, con lo cual estamos peor que antes". Si, por una parte, el retraso en el cobro de las indemnizaciones por el despido y del subsidio de desempleo llevan a unos trabajadores a la economía sumergida, por otra los Costes laborales y sociales provocan el cierre de las empresas y la conversión de éstas en industrias sumergidas. "Estas razones explican el aparentemente incomprensible hecho de que si en cinco años se han perdido 25.000 puestos de trabajo, hoy se exporte más del doble que en 1981. Para muchas empresas, ésa es la única manera de poder competir con un zapato de calidad, ante la producción de otros países donde las cargas fiscales y sociales son menores", añadió Bernabéu.

Por otra parte, tanto UGT como CC OO insisten en la necesidad de cambiar la actual legislación en materia empresarial. "La ley de Sociedades es de 1951, y en ella no se establece ningún control sobre el patrimonio de la empresa; la de Suspensión de Pagos es de 1920, y la del Leasing, de 1965. En un sector manufacturero como el del calzado se puede montar una empresa con toda la maquinaria alquilada, y de un día para otro puede ser desmantelada y cerrada, sin que exista patrimonio para hacer frente a las indemnizaciones a los trabajadores y a las deudas a la Administración", manifestó Pascual Pascual.

Asimismo, las centrales consideran importante la agilización de los cobros por parte de los trabajadores, para evitar que en los tres o cuatro meses que tardan en cobrar el desempleo tengan que acudir a la industria sumergida para subsistir.