Los amotinados en la prisión de Elba liberan a uno de sus 22 rehenes

Los ocho prisoneros armados que el martes tomaron 22 rehenes -17 militares y cinco civiles- en la prisión de la isla italiana de Elba mantenían ayer la exigencia de un helicóptero y un piloto para huir, mientras la policía rodeaba todo el penal. Uno de los rehenes, cuya identidad no se ha especificado, fue liberado anoche por los presos, uno de los cuales disparó al aire cuando un magistrado se acercaba a ellos para discutir sus demandas.

Los amotinados, encabezados por el neofascista Mario Tuti, amenazaron con una matanza si son atacados desde fuera y afirmaron que han minado el cuarto piso de la prisión, donde está la enfermería, en la que mantienen a los rehenes. Tuti está condenado a cadena perpetua por varios asesinatos, entre ellos los de dos policías.

"Estamos condenados de por vida, así que no tenemos nada que perder, salvo nuestras cadenas", declaró Mario Tuti, de 40 años, a la agencia italiana de noticias Ansa. El neofascista agregó que han rociado a algunos de los guardias en su poder con alcohol y que a otros les han atado a las puertas de acceso a la enfermería.

El director de la prisión, Cosimo Giordano, también en manos de los amotinados, envió un mensaje recomendando negociar. Mientras, el Gobierno italiano ha decidido seguir negociando con los amotinados, pero sin ceder a sus exigencias de facilitarles un helicóptero. El alcalde de Porto Azzurro, Maurizio Papi, ha explicado que las autoridades del Gobierno le han garantizado que se excluye cualquier intervención violenta para resolver el conflicto.