El plan prevé construir unas 50.000 viviendas

S. A., Las líneas técnicas del nuevo pIan cuatrienal para el período 1988/1991, en las que no existen problemas especiales entre los ministerios de Economía y Obras Públicas, establecen una fuerte reducción del papel de las viviendas de protección oficial en el conjunto del sector. Frente a las 110.000 viviendas anuales previstas en el plan que termina este año (en 1987 se iniciarán 100.000 viviendas), el nuevo establece una horquilla entre 40.000, en el peor de los casos, y 70.000 en la hipótesis más optimista.

La reducción del número de viviendas a construir con ayudas públicas obedece a la decisión de rebajar el colectivo de personas que tendrá derecho a gozar de las ayudas públicas. En la actualidad, las personas que cobran un salario inferior a 3,5 veces el salario mínimo interprofesional (algo más de 1.360.000 pesetas al año) pueden adquirir una vivienda de protección oficial y contar con una subvención en los tipos de interés que tienen que satisfacer. El nuevo plan rebajará hasta 2,5 veces el salario mínimo interprofesional los ingresos anuales de aquellos que soliciten una vivienda protegida.

Junto a esta limitación para el acceso a estas viviendas se han propuesto otras modificaciones que tienen relación con el salario real de la unidad familiar, la situación geográfica de los compradores, la posible revisión de las ayudas a lo largo de la vida del préstamo hipotecario y la superficie construida de las viviendas.

Así, se trata de tener en cuenta si en la unidad familiar existe una acumulación de rentas que supere el tope de las 2,5 veces el salario mínimo interprofesional, o si los adquirentes de viviendas de protección oficial cuentan con una acumulación patrimonial (una vivienda anterior, por ejemplo) que haga más innecesaria la necesidad de ayudas para poder acceder a la compra de una vivienda. También se estudia la posibilidad de establecer alguna corrección al cálculo de ingresos anuales en función de dónde vivan los compradores. Esto se explica porque, en opinión de los responsables del plan, no es lo mismo ganar 2,5 veces el salario mínimo en las grandes zonas industriales que en ciudades pequeñas o en pueblos.

Otro de los posibles mecanismos de redistribución de los fondos públicos movilizados para las viviendas de protección oficial es revisar, una o dos veces a lo largo de la vida del préstamo hipotecario, si las personas que en un principio cumplían los requisitos para recibir las ayudas siguen en la misma situación una vez que ha transcurrido un determinado período de tiempo.