El Gobierno investiga la ausencia de un controlador aéreo en Fuerteventura

El Gobierno, a través de su delegado en Fuerteventura, ha solicitado a Aviación Civil un informe completo de los hechos ocurridos el pasado sábado en el aeropuerto de aquella isla, cuando un vuelo de la compañía Iberia tuvo que retrasar 20 minutos su aterrizaje por ausencia del controlador de servicio, por si fuesen constitutivos de sanción no sólo a nivel de funcionarios, sino también a nivel directivo.

"Hemos solicitado una información completa de los hechos y las personas implicadas", explicó el delegado del Gobierno, en funciones, quien estima que, dado que cualquier fallo humano debe ser subsanado rápidamente gracias a la cobertura de seguridad que todo aeropuerto debe tener, se investigan también otras posibles responsabilidades.La Delegación del Gobierno en Fuerteventura espera tener hoy completo el informe de los hechos para delimitar las responsabilidades individuales y de todo el aparato del aeropuerto. Pero el Gobierno Civil sólo tendrá competencias, a la hora de penalizar la presunta infracción, si los hechos no se estiman como muy graves; en ese caso será el Consejo de Ministros el encargado de sancionar al o los culpables.

La Dirección General de Aviación Civil, por su parte, ha abierto expediente y ha comenzado a recabar información sobre el incidente.

Juan Ruiz Martínez, director del aeropuerto de Fuerteventura, que intentó minimizar el hecho, declaró que los fallos humanos son inevitables, pero existen "procedimientos para corregir disfunciones". Precisó que, en realidad, el avión sólo entró con 11 minutos después de lo previsto y sin novedad de ningún tipo". Todo ello, aunque es cierto, fue posible gracias a que el Boeing 727 llegó con nueve minutos de adelanto sobre su horario habitual.

El presunto controlador infractor es uno de los cuatro que en la actualidad presta servicios en la torre de control del aeropuerto majorero, en donde hay una media de 70 vuelos y 48.000 pasajeros a la semana. "En días punta ha habido hasta 14 operaciones", precisó Juan Ruiz.

Un controlador tiene un turno de 12 horas, en el que se incluye el horario operativo y el margen previsto para chequear las instalaciones, cosa que el presunto trabajador negligente debía haber hecho el sábado a las 8.30.

Para el responsable del aeropuerto, los mecanismos de seguridad funcionaron perfectamente. El personal del aeropuerto, tras apercibirse de la ausencia del controlador de turno, se puso en marcha a la búsqueda de un sustituto, al que las circunstancias hicieron más fácilmente localizable, dado que se encontraba despidiendo a su novia en el mismo recinto.