Cuando calienta el dólar
El turismo español alcanza cifras gigantescas. Los dos millones de plazas turísticas existentes generaron en 1986 unos ingresos de 12.058,4 millones de dólares, un 47,9% más que en 1985. Eso equivale a cerca de dos tercios del saldo positivo de la balanza de pagos (17.327 millones de dólares). En pesetas, la aportación de la primera industria nacional fue de 1,67 billones, un 21,67. más que en 1985.Fue un récord histórico: "Estuvimos seis meses trabajando al 95% de ocupación", reconoce el hotelero Ramón Bagó, ex director general de Turismo de la Generalitat de Cataluña y alcalde de Calella de la Costa, la Calella de los alemanes. Y 1987 aún mejora: de enero a abril, los ingresos alcanzaron 442.389 millones de pesetas, un 9,4% más que en el primer cuatrimestre de 1986.
La contribución turística a las grandes cifras de la economía española sigue, pues, en ascenso. Y, pese a ello, "estamos desatendidos por el sector público a la hora de mejorar la oferta, el sector público hace escasos esfuerzos por mejorar la infraestructura", se lamenta Bagó. Y es que "el entorno forma parte cada vez más del paquete turístico que ofrecemos", y se necesitan nuevas instalaciones para cubrir nuevas necesidades.
Nuevas necesidades que surgen al compás de nuevos desarrollos. Un caso práctico: las colas de media tarde frente a las cabinas en Arenals del Sol, Elche, donde hay cuatro teléfonos a repartir entre unas 10.000 personas. Es el colapso.