El paso al frente del candidato
Las propuestas para la democratización de Corea del Sur presentdas por Roh Tae Woo, el hombre de confianza del presidente Chun Doo Hwan -son originarios del mismo pueblo, amigos de promoción en la escuela militar, compañeros de armas en Vietnam y colegas en el golpe militar de 1979-, suponen un paso al frente de un ex general convertido en político, que pasa por ser más flexible y liberal que el actual presidente. También se le reconoce la virtud de escuchar más que hablar.Nombrado el pasado 10 de junio para suceder a Chun en febrero de 1988, Roh se encontró con una protesta popular en auge, iniciada por los estudiantes y canalizada por la oposición, que pedía una rápida reforma constitucional, elecciones presidenciales directas y libertades democráticas para Corea del Sur.
Las manifestaciones del pasado viernes movilizaron a decenas de miles de surcoreanos de la denominada aquí clase media y pusieron en duda la celebración en Seúl de los Juegos Olímpicos de Verano de 1988. El poder autoritario de los ex generales se tambaleó y Roh, ayer, decidió dar un paso al frente y proponer a Chun que acepte las condiciones de la oposición. Con ello, Roh Tae Woo ha comenzado, en realidad, su propia campaña a candidato presidencial, al presentarse ante los surcoreanos como un líder que se desvincula de Chun y como un hombre de diálogo que acepta las reglas de juego pedidas por la oposición: las elecciones directas. Después de su de claración televisada al país, Ro se fue al cementerio nacional, e tributo a los patriotas coreanos y a continuación, a Hyon Chun Sa, para honrar al patriota de la dinastía Yi, el general Yi Sun Sin que en 1592 ganó una batalla crucial a los japoneses, tradicionales enemigos de los surcoreanos. Después, Roh visitó a lo policías heridos durante las manifestaciones, pero también a padre del estudiante que, desde el 9 de este mes, se encuentra en estado de coma, al haber sido víctima de un trozo de granad lacrimógena que le dio en plena cabeza. Roh, en definitiva, adquirió ayer dimensión de futuro estadista surcoreano, probable mente con la esperanza de que así lo confirmen las próxima elecciones presidenciales.
