Juan Barranco será elegido hoy alcalde de Madrid

Juan Barranco resultará elegido hoy alcalde de la capital de España, puesto que ocupa desde enero de 1986, a raíz de la muerte de Enrique Tierno, al ser el PSOE la formación más votada, aunque sin haber obtenido la mayoría absoluta. Esta situación se produce una vez que el CDS ha decidido definitivamente no pactar con AP, pese a las ofertas de esta fuerza, para gobernar este municipio, de más de tres millones de habitantes. Tampoco han fructificado las ofertas socialistas al partido de Suárez para que el CDS entrase en el equipo municipal o al menos suscribiese un programa de gobierno.

Izquierda Unida, según fuentes de la Ejecutiva regional del PCE, consideraba anoche "más que probable" la abstención hoy de sus tres concejales, cuyo apoyo, en todo caso, tampoco daría la mayoría absoluta al PSOE (24 concejales), ya que les faltaría uno para los preceptivos 28, toda vez que la corporación la forman 55. El CDS ha optado por la equidistancia entre la derecha y el PSOE y ha renunciado a la combinación política de sumar sus ocho concejales a los 20 de AP. No en vano la ausencia eventual de alguno de los concejales aliancistas, no caracterizados precisamente por su masiva asistencia a los plenos, o de los centristas dejaría a esta hipotética coalición en minoría frente a la unión de PSOE e IU, en el caso de que éstos acudieran y votaran en bloque.La batalla de Madrid -cuyo presupuesto municipal, 141.298 millones, supera el de varios ministerios- tenía una trascendencia que rebasaba el ámbito municipal- El CDS ha decidido valorar el significado simbólico que tendría en toda España, sobre todo con vista a las próximas legislativas, su alianza en el gobierno municipal de la capital tanto con el PSOE como con la derecha representada por AP, y ha preferido mantener su empeño se ser alternativa a ambas.

Alianza Popular, por su parte, ha renunciado a hacer alcalde a la fuerza -sin previo pacto- al candidato centrista, Agustín Rodríguez Sahagún, como en algún momento se llegó a insinuar.

El PSOE, por su parte, a su me en precario esta etapa gobierno municipal, ya que, sus 20 concejales, está a merced de los 31 que suma la oposición. Esto condicionará toda su labor, lo que implicará un cambio de estilo, que pasará por un mayor diálogo con la oposición y pactos sobre cada punto concreto. De no cumplirse estas premisas como forma de gobierno, se podría llegar a una moción de censura por parte de la oposición, que implicaría el cese del alcalde.

El único acuerdo alcanzado entre socialistas e Izquierda Unida en la región madrileña se circunscribe a facilitar, mediante una recíproca abstención, que gobierne la formación más votada de ambas. En el territorio de la Comunidad no se da el caso de una alcaldía que pueda ser arrebatada a los conservadores mediante un pacto entre PSOE e IU. Según el presidente de la Federación Socialista Madrileña, José Acosta, pese al sensible descenso experimentado por el PSOE en el Ayuntamiento de la capital y en la Asamblea regional, donde ha perdido la hegemonía, el partido ha obtenido mayoría absoluta en 57 de los 178 municipios de la región y confían en obtener hoy entre 70 y 80 alcaldes, es decir, de 20 a 30 más que en los obtenidos en 1983, lo que indica la expansión del PSOE en el ámbito rural.

El PSOE, pues, trabaja en la hipótesis de gobiernos socialistas en minoría basados en su propio programa para todas aquellas instituciones donde ha sido la candidatura más votada.

Respecto de la Asamblea regional madrileña, el panorama es similar. La única duda consiste en si "los amigos de Izquierda Unida" -en expresión del presidente de la FSM- votarán o no a favor de la investidura de Leguina, ya que esa formación, según informó Acosta, tomará su decisión en función del programa que esboce en su discurso el candidato socialista a la presidencia regional.