El Rey envió un avión a Sanguinetti porque el suyo se averió en Barajas

El Rey Juan Carlos puso a disposición del presidente de Uruguay, Julio María Sanguinetti, un avión DC-8 de la Fuerza Aérea Española para que lo trasladese desde Múnich a Madrid ayer por la mañana y para que pudiese regresar anoche a su país, después de que el avión en el que debía viajar el mandatario uruguayo sufriese una avería en el aeropuerto de Madrid-Barajas.Un Boeing-707 de las líneas aéreas uruguayas PLUNA, llegó el miércoles por la tarde a Barajas, donde quedó estacionado. Durante la madrugada, un autobús de Iberia también aparcado cerca de las pistas y, al parecer sin frenos, comenzó a rodar y chocó contra una de las turbinas del aparato, que quedó inutilizado para volar.

A primeras horas de la mañana se plantearon una serie de dudas sobre cómo resolver el traslado de Sanguinetti, que tenía previsto almorzar con el Rey, hasta que, enterado don Juan Carlos de la situación, decidió el envío del avión oficial español.

Sanguinetti llegó a Madrid con hora y media de retraso sobre el horario incialmente previsto, para una estancia de 12 horas. Tras su encuentro con el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, que le recibió en el aeropuerto, Sanguinetti se desplazó al palacio de la Zarzuela, donde los Reyes le ofrecieron un almuerzo.

Posteriormente mantuvo una entrevista con el presidente del Gobierno, Felipe González, que también estuvo invitado en la comida. En este encuentro analizaron el estado de las relaciones bilaterales, la situación en Centroamérica y las relaciones entre Iberoamérica y la CE.