Juan de los Reyes reaparece en Las Ventas tras una grave cogida

El novillero madrileño Juan de los Reyes, que sufrió una grave cornada el pasado 11 de mayo, en Valdemoro, reaparece mañana en Las Ventas. Se queja de las injusticias que son habituales en la fiesta de toros y de la precaria situación económica de los novilleros, que no cobran por sus actuaciones o, sí les pagan, no, tienen ni para los gastos. Alternará con Niño de la Taurina y Alberto Martínez en la lidia de novillos de Pablo Mayoral.

"La fiesta es muy injusta y dura, y no hay quien la cambie", dice Juan de los Reyes, de 19 años, que actualmente está realizando el servicio militar en el Cuartel Inmemorial del Rey, en las cercanías del palacio de la Moncloa. Trabaja, además, de camarero, y ha de dedicar su escaso tiempo libre a entrenarse. "Mi vida también es muy dura", dice, "me levanto a las seis y media de la mañana para entrenar dos horas, después me voy al cuartel, donde he de reconocer que cuento con la ayuda y comprensión de mis jefes, y por la tarde, al bar, hasta las doce de la noche".Pero De los Reyes no se queja por su amplia jornada laboral y afirma que le sirve de experiencia: "Así me curto, pues ya estoy acostumbrado a la lucha dentro y fuera de los ruedos". El novillero asegura que nunca ha gozado de las facilidades que tienen otros compañeros de apellidos famosos o que pertenecen a casas importantes.

De los Reyes ha toreado esta temporada cuatro tardes -una de ellas en Madrid, donde fue ovacionado en sus dos novillos- y ha perdido dos por el percance citado. Dice que su alternativa será a finales de año, aunque depende del resultado de mañana: "No puedo aguantar más de novillero, porque, además, económicamente es un desastre: o no cobras, o te pagan como máximo 125.000 pesetas, con las que no tienes ni para los gastos".

Carlos Collado, Niño de la Taurina, al que apodera Manolo Cano, un hombre relacionado en negocios taurinos con los influyentes hermanos Lozano, coíncide en señalar que no existe dernasiadajusticia en el mund o taurino, "aunque también en este asunto se exagera", dice. El novillero toledano, de: 17 años, afirma que ha tenido mucha suerte con que le apodere Cano: "Mi carrera va mejor de lo que yo hubiera imaginado, pero yo he hecho mi trabajo, que consiste en triunfar en el ruedo para que él pueda negociar más fácilmente".

Niño de la Taurina ha toreado ocho tardes este año hasta la fecha, casi todas en plazas de primera categoría -entre otras, Madrid, Barcelona y Valencia-, en las que ha alcanzado importantes éxitos, aunque la espada le impidió redondearlo en Las Ventas. "Precisamente en esta plaza", comenta, "ha sido donde más interés tenía en matar bien para cortar orejas, pero en mis dos actuaciones anteriores me tuve que conformar con ovaciones y vueltas al ruedo. Espero poder conseguirlo mañana".

El valenciano Alberto Martínez, de 18 años, repite también en Madrid, tras su presentacíón del pasado domingo. Encontró muy fría a la afición madrileña tanto con él como con su compañero, también apoderado por Camará, Rafi de la Viña, triunfador en San Isidro. "Pensé que nos iba a recibir mejor, sobrétodo a él", agrega, "pero mañana les haré que se entreguen, pues con la novillada de Mayoral pienso alcanzar el éxito que ya tuvo De la Viña el día de su presentación".