El CDS pretende que se autorice la televisión por cable

Federico Ysart, diputado del Centro Democrático y Social (CDS) presentó ayer el texto alternativo elaborado por su partido al proyecto de ley de televisión privada, remitido por el Gobierno a las Cortes. En su texto el CDS mantiene la concesión administrativa para el sistema de televisión convencional e introduce la autorización para la televisión por cable.El proyecto de los centristas, presentado en una conferencia de prensa celebrada en el Congreso de los Diputados, no fija el número de canales de televisión ni su ámbito de cobertura, cuestión que queda sometida al plan técnico de televisión, al contrario de lo que hace el Gobierno en su proyecto de ley, y pide la derogación del monopolio estatal sobre el cable.

Ysart subrayó que al regular la televisión privada se aborda el desarrollo de un derecho constitucional, que arranca del artículo 20 de la Constitución española, referido a los derechos fundamentales del ciudadano.

Destacó que el texto alternativo del CDS amplía las posibilidades de emisión de la televisión privada a todos los sistemas técnicos posibles, derogando expresamente el monopolio estatal sobre el cable.

El CDS, en su texto alternativo, deja varias cuestiones a un posterior desarrollo reglamentario. Por ejemplo, no fija la solvencia económica de la empresa aspirante a la concesión de un canal (tanto el proyecto del Gobierno como el texto alternativo de AP fijan 1.000 millones de pesetas para un canal nacional).

Federico Ysart manifestó que para el CDS la televisión privada también es un servicio público, aunque matiza en el artículo 12 del texto alternativo que su titularidad corresponde al Estado, sin perjuicio del derecho de los ciudadanos a comunicar o recibir libremente información veraz por cualquier medio de difusión, según recoge la Constitución.

El diputado del CDS destacó la importancia del denominado en el texto alternativo Instituto Nacional de Televisión, organismo autónomo de origen parlamentario, que asume las siguientes competencias: elaborar el plan técnico de televisión, otorgar autorizaciones y concesiones, ejercer el control e inspección, etcétera. Con ello se trata de garantizar el ejercicio imparcial de la libertad de información.

Ysart señaló que el Instituto Nacional de Televisión tiene como función, también, salvaguardar el pluralismo social, "y pondera, para evitarlo, el riesgo de concentración en el sector de la comunicación". El proyecto del CDS reconocen competencias a las comunidades autónomas para la regulación de la actividad televisiva en el ámbito regional o local.