El gobernador general de las islas Fiji se compromete a convocar elecciones

El gobernador general de las islas Fiyi., sir Panaia Ganilau, reafirmó ayer su firme oposición a los militares golpistas, rechazó otorgar la investidura al nuevo Consejo de Ministros y se comprometió a organizar elecciones generales. En una declaración difundida por Radio Fiyi, que se encuentra bajo control militar, el representante de la reina Isabel II -jefe de Estado titular de los fiyianos independientes- explicó que había reconsiderado su decisión de oficializar dicho consejo, designado por el artífice del golpe de Estado, teniente coronel Sitiveni Rabuka.

Ganilau agregó que el citado organismo era "ilegal" y anunció que nombraría su propio Consejo de Jefes, que disolvería el Parlamento y convocaría elecciones generales para poner fin a la crisis política en ese archipiélago del Pacífico. El gobernador general ha recibido el apoyo de la reina Isabel II. Australia y Nueva Zelanda, por su parte, han condenado el golpe de Estado del pasado jueves.Mientras tanto, una fuente oficial confirmó en Suva que los 28 miembros del Gobierno fiyiano detenidos tras el golpe de Rebuka han sido liberados. Los ministros habían sido detenidos y reagrupados, en los primeros momentos del golpe, en Veiuto, la residencia del primer ministro derrocado, Timoci Bavadra. Posteriormente fueron separados.

Según algunos observadores, se habría llegado a alguna forma de compromiso entre los golpistas de Rabuka y el gobernador Ganilau, ya que éste ha aceptado la petición de los insurrectos que reclamaba una revisión de la Constitución de manera que garantice a los melanesios, ligeramente minoritarios en relación a los indios, un cierto control del poder.

La situación, no obstante, se mantenía tensa ayer, en particular la relación entre la Prensa extranjera y las fuerzas del orden. Tim Cribb, periodista de la Agencia France Presse de nacionalidad australiana, fue detenido el martes en Suva, la capital del archipiélago de las Fiyi, cuando transmitía por teléfono a la oficina de dicha agencia en Sidney (Australia) un reportaje sobre las horas posteriores al golpe de Estado. Cribb fue liberado dos horas más tarde.

Por otra parte, un golpe con una botella de whisky en la cabeza del secuestrador, propinado por un ingeniero mecánico neozelandés, puso fin ayer al secuestro del avión Boeing 747 de la compañía Air New Zealand, según anunció el responsable de la aviación civil fiyiana, Johnny Koroi Tamana.

El pirata del aire, Ahmed Ali, de 37 años, un fiyiano empleado del servicio de abastecimiento de los aparatos en el aeropuerto de Nadi, había tomado posesión del avión neozelandés seis horas antes.