Ocho horas mediaron entre las dos muertes del hotel Meliá

Ocho horas mediaron entre la muerte del cordobés Antonio Sánchez y la del canario Antonio Ramírez, que fueron encontrados muertos el miércoles en una habitación del hotel Meliá de Madrid, según el resultado de la autopsia, de la que informó ayer el diario Córdoba.El cadáver de Sánchez Bravo, de 41 años, continuaba ayer en el Instituto Anatómico Forense de Madrid, ya que no ha sido reclamado por sus familiares. Sánchez Bravo murió antes que el canario Antonio Ramírez, de 54 años, quien, según la policía, mató a su compañero de habitación y luego se suicidó.

Ni en este caso, ni en los otros cuatro de esta semana que acabaron con muerte -entre ellas las de dos policías y un vigilante- hay detención alguna.

En el atraco al pub donde murió el policía Mariano Mateo Sanz participaron cuatro delincuentes armados. Según la policía, los atracadores se comportaron con frialdad, como auténticos profesionales.

En medio de una ensalada de tiros -se efectuaron más de 14 disparos- remataron al policía, persiguieron a otro agente, que también se encontraba en el local y que se había enfrentado a ellos, y les quedó tiempo, antes de huir en una furgoneta, para recoger el dinero de la caja y las pertenencias de los clientes.

Tampoco hay detenidos por la muerte de Lino Goas Vidal, de 30 años, el vigilante jurado que resultó muerto el jueves al ser alcanzado en el pecho por disparos de dos atracadores en un establecimiento comercial.

Los dos atracadores se habían apoderado del importe de la caja de la primera planta de las Galerías Sepu, situadas en la confluencia de las calles de Virgen del Sagrario y Alcalá, y se disponían a hacer lo mismo en la segunda planta cuando se encontraron con el vigilante. Se desconoce el importe de los robado.

Por otra parte, Manuel Rodríguez Ortiz, de 28 años, casado y camarero de profesión, resultó muerto de una puñalada en el abdomen en la madrugada del viernes en el curso de una reyerta, en la calle de Andrés Saborit, situada en la localidad de Alcalá de Henares. Testigos del suceso explicaron que la víctima tomaba una copa en un pub. Entró un hombre y los dos se saludaron efusivamente. Posteriormente se les oyó discutir y proferían insultos. Cuando ambos salieron a la calle continuó la pelea y Manuel Rodríguez fue apuñalado. Su agresor se dio a la fuga.

A lo largo de esta semana resultó muerto también el policía Antonio Sánchez Tomel, de 38 años, en un atraco que se produjo en el club Los Angeles de Charlie, situado en la localidad de Fuenlabrada. Las sospechas sobre este homicidio se centran en quinquis de la barriada de Los Toreros, de Villaverde Alto.