Los 183 ocupantes de un avión de la compañía Lot mueren al estrellarse el aparato cerca de Varsovia

Los 183 ocupantes de un avión Byuchine 62 de la compañía aérea polaca Lot murieron ayer por la mañana al estrellarse el aparato poco después de despegar del aeropuerto de Varsovia-Okecie. "No hay supervivientes" confirmó a media tarde una alta fuente de la compañía. "Polacos en su mayoría, pero también 17 estadounidenses" agregó, iban a bordo del vuelo charter con destino a Nueva York, que estaba completo. El accidente es la catástrofe aérea más importante registrada en Polonia.

El siniestro fue provocado por el fallo de dos de los cuatro motores que tiene el llyuchine 62, que quedaron bloqueados y se incendiaron, según las primeras explicaciones extraoficiales. La catástrofe, que costó la vida de los 172 pasajeros y 11 tripulantes del avión de fabricación soviética, se produjo a las 11.12 horas.El comandante del aparato, Zygmunt Pawlarczyk, alertá a la torre de control del incendio de los dos motores. Este hecho se produjo cuando el aparato se encontraba ya a unos 200 Hómetros al noroeste de Varsovia, a la altura de Grudziadz, según informó el jefe de escala de la compañía, Stefán Zielinski.

"El comandante pidió regresar con urgencia a Okecie [en la capital polaca], y fue al acabar de vaciar los depósitos de combustible cuando se estrelló", a (los kilómetros de ese aeropuerto, dijo Zielinski.

Otra fuente, el ayudante del director de la Lot, Krzystof Jaskot, había señalado -al parecer apoyándose en las últimas comunicaciones registradas entre la tripulación y la torre de control- que el comandante había dado un rodeo para evitar que el aparato sobrevolara la ciudad-dormitorio de Ursynow (de 140.000 habitantes), después de que se produjera el incendio de dos de los motores.

Una estela de humo

Después de volar a baja altitud y dejando, según testigos del accidente, una larga estela de humo, el aparato se estrelló contra el suelo en un bosque de Kabaty, al sur de la capital polaca. Los restos del aparato se esparcieron en un radio de 600 metros, mientras que el incendio del bosque se extendió a cuatro hectáreas, según informaciones de la radio polaca.

Testigos de la caída del avión dijeron haber visto numerosos cuerpos calcinados y mutilados. Poco después de la catástrofe, unidades de los zomos (fuerzas antidisturbios) rodearon la zona y alejaron a los curiosos. "Oí un horrible estampido al caer el aparato, y después vi cuerpos colgando de los árboles", declaró una mujer que presenció la catástrofe.

Según Jaskot, no se había descubierto ninguna anomalía durante los controles técnicos efectuados antes de que despegara el aparato, que había sido adquirido por la compañía, nuevo, en 1984.

El avión había totalizado 5.000 horas de vuelo, y debía pasar su primera revisión a las 10.000. Podía transportar 186 pasajeros, y tenía una autonomía máxima de vuelo de alrededor de 9.200 kilómetros. El 1162, concebido por el equipo de Serge llyuchine, es el primer avión soviético moderno para vuelos intercontinentales, y está destinado a sustituir a los viejos Tupolev 114 con motores de pistón.

Poco después del mediodía, numerosos familiares de pasajeros acudieron, consternados, al aeropuerto de Varsovia-Okiece en busca de noticias sobre el siniestro. Las dos líneas de teléfono que fueron puestas a disposición del público comunicaban permanentemente.

Según la agencia polaca Pap, una comisión presidida por el viceprimer ministro polaco, Zbiegniew Szalajda, que investigará las causas del sinistro, se dirigió al lugar de la catástrofe. El papa Juan Pablo II, nacido en Polonia, que visitará ese país el mes próximo, se mostró visiblemente afectado al recibir la noticia del accidente, y se retiró a rezar a la capilla privada de su residencia, según fuentes vaticanas. Mensajes de condolencia fueron enviados al jefe de Estado polaco, Wojciech Jaruzelski, por autoridades de diversos países; uno de los primeros, fue el del presidente italiano, Francesco Cossiga.

Janina Szulc, de 43 años, una polaca residente en Estados Unidos desde hace seis años, que debía viajar en el avión sinistrado, salvó su vida por el exceso de equipaje que llevaba y el celo de los aduaneros polacos, que le hicieron per der el vuelo. "Tenía exceso de equipaje porque llevaba muchos regalos para mis amigos", declaró. Su hijo afirmó: "Qui siera abrazar a los aduaneros".

La mayor catástrofe

Esta catástrofe aérea es la mayor ocurrida en Polonia, y una de las 15 más importantes de la aviación civil. El 14 de marzo de 1980, un 11-62 de 1

Lot que venía de Montreal se estrelló al llegar a Varsovia. No hubo supervivientes entre los 87 ocupantes. En marzo de 1977 se produjo el mayor accidente de la aviación civil: 587 personas murieron al chocar dos aparatos Boeing 747, uno de la Pan American y otro de la KLM, en el aeropuerto de Los Rodeos, en la isla de Tenerife.

En agosto de 1985 un Boeing 747 de la Japan Airlines se estrelló en el vuelo de Tokio a Osaka y 520 personas murieron en el accidente, el mayor sufrido jamás por un solo aparato. En marzo de 1974 se estrelló un DC 10 turco al noreste de París: hubo 346 muertos. En junio de 1985, un Boeing 747 de Air India estalló en pleno vuelo al suroeste de Irlanda: en el accidente murieron 329 personas. En 1980, hubo 301 víctimas fatales, en un aterrizaje de emergencia de un avión saudí.