Los transbordadores españoles son de características similares al buque naufragado
Los transbordadores españoles tienen, en lo esencial, las misma características que el Herald of Free Enterprise, el buque británico que naufragó el viernes en la costa belga. En particular, los buques españoles de este tipo disponen también de un puente de carga de vehículos que ocupa toda la extensión del barco, de proa a popa y de estribor a babor, sin mamparos de separación que actúen de compartimientos estancos en caso de que entre agua.
Antonio Prego, inspector general de buques de la Dirección General de la Marina Mercante, declaró ayer a este diario que la ausencia de mamparos es "la enfermedad congénita de estos barcos", aunque precisó que precisamente por ello a los transportadores de carga rodada se les exigen unas características de estabilidad especiales. "Si no se hace ninguna barbaridad", dijo Prego, "no existe un peligro mayor en estos buques que en los demás".La legislación internacional no exige la colocación de los mamparos, porque impediría que estos buques ejercieran su función de transportar vehículos. La normativa, por el contrario, sí que exige que los vehículos viajen frenados y convenientemente trincados, así como que dispongan de unas bombas de achique de gran potencia.
Los transbordadores españoles pertenecen esencialmente a dos compañías: Trasmediterránea e Isnasa (Isleña de Navegación, SA). La Trasmediterránea dispone de 15 buques de estas características: tres en las líneas Algeciras-Ceuta y Algeciras-Tánger; siete entre la península y Baleares; uno en el trayecto Málaga-Melilla; dos en la línea Génova-Canarias y dos cubren las líneas interiores entre Gran Canaria y Tenerife.
Isnasa dispone de cinco transbordadores: tres en la línea Algeciras-Ceuta; uno en la travesía Tarifa-Tánger, y otro en la de Denia-Ibiza.
Sólo los dos barcos de la Trasmediterránea que cubren las líneas interiores de las Canarias y los tres de Isnasa de la línea Algeciras-Ceuta disponen de portones de acceso de vehículos en proa y en popa, como el Herald of Free Enterprise. Los demás transbordadores españoles tienen un portón a popa o en uno de los costados. Tanto Prego, como Juan Trigo, subdirector de Seguridad Marítima, y fuentes de la Trasmediterránea aseguraron que la existencia de dos portones en nada afecta a la seguridad del buque. Los expertos niegan asimismo que el poco calado o el sistema de doble hélice puedan ser peligrosos. El subdirector general de Tráfico Marítimo, Miguel Hernández, consideró que los puertos españoles son más seguros que los del mar del Norte, porque las aguas son aquí más profundas, y los accesos, más libres.
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