Conversaciones entre EE UU y China.
El secretario de Estado norteamericano, George Shultz, que comenzó el domingo una visita de cinco días a Pekín, se reunió ayer con los miembros de la dirección china, a quienes pidió que no se altere la política de apertura a Occidente que ha supuesto la expansión y transformación de la economía china. Shultz -que aparece en la foto junto al secretario general del partido comunista, Zhao Ziyang- discutió con sus interlocutores los cambios que implica la reciente campaña contra el liberalismo burgués. Por su parte, los dirigentes chinos expresaron a Shultz su preocupación ante el riesgo de que la crisis provocada por el Irangate deteriore la política de EE UU en Extremo Oriente.
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