Una comisión reconoce contrataciones irregulares en el Ayuntamiento de Gandía

La comisión investigadora que estudia el posible nepotismo en las contrataciones del Ayuntamiento de Gandía, en Valencia, regido por socialistas, ha encontrado, según las actas de las reuniones celebradas, indicios de irregularidades en varios casos. La comisión, que ha trabajado sobre un total de 30 casos denunciados, tiene previsto emitir hoy un dictamen sobre las investigaciones realizadas.

La denuncia de los 30 casos fue hecha por el concejal de Unión Valenciana, Ignacio Malonda quien ha solicitado que dimitan los responsables de las irregularidades. La comisión está formada por cuatro concejales socialistas, uno de Alianza Popular, un independiente, uno de Unidad Comunista, uno de Unión Valenciana y uno de Unitat del Poble Valençià.Según las actas de dicha comisión, a las que ha tenido acceso este periódico a pesar de existir pacto de silencio entre los nueve componentes de la misma, cerca de 25 de los contratos estudiados se refieren a familiares de los concejales socialistas o militantes del PSOE. Entre ellos se encuentra el propio hijo de Salvador Moragues, alcalde socialista de Gandía. A pesar de no existir dictamen, en las actas sí se estudian contrataciones que, al parecer de la mayoría de los integrantes, son irregulares. Es el caso de Ignacio García, que, según el gerente de la fundación deportiva municipal, es contratado por ésta porque, "al ser el hijo del encargado, se creyó que junto a su padre trabajaría mejor". O de Salvador Sancho, primo del alcalde, que es contratado, siendo jubilado, por indicación de Salvador Moragues, según afirma el concejal de Unitat del Poble Valençià, Cebrià Molinero.

En la misma comisión, y tras la comprobación de la existencia de contratos irregulares, Emilio López, concejal socialista, manifestaba: "Se ha comprobado que hay una o dos irregularidades desde el punto de vista jurídico, pero con anterioridad había más". Con ello hacía referencia a la anterior legislatura, presidida por el centrista Juan Román. Otro caso denunciado es el del contrato de María del Carmen Blasco Morant, sobrina de la esposa del alcalde.

Irregularidades consentidas

Según Cebrià Molinero, en el caso de varias personas adscritas a la Universidad Popular que fueron contratadas sin ningún tipo de concurso ni oposición, "la irregularidad fue consentida por todos los miembros de la Comisión de Cultura". Otra de las contrataciones investigadas es la de María José Maseres, que, habiendo obtenido el sexto lugar en una oposición a ordenanza, fue llamada antes que el cuarto y el quinto porque "el cuarto aspirante se interpretó vivía en Bellreguart, localidad que dista dos kilómetros de Gandía, con lo cual sería más difícil su localización".En el servicio de asistencia social se contrató una auxiliar durante un viaje de la concejala delegada, Rosario Santiago, del grupo independiente, resultando que dicha auxiliar "es la hija de la mujer de la limpieza del alcalde y, además, trabajó en su despacho de seguros".

Otra de las acusaciones graves producidas en el transcurso de la comisión ha ocurrido al indicar Ignacio Malonda que "la profusión de altas en el PSOE se debe a la existencia de boletines de inscripción en los despachos del Ayuntamiento".