Protestas por la entrega a la policía de residentes vascos en territorio francés

Una manifestación de varios centenares de personas recorrió ayer a primera hora de la tarde las calles céntricas de San Sebastián para protestar por la entrega a España de exiliados vascos en territorio francés. Durante la marcha fue volcado un automóvil con matrícula del país vecino. Otras manifestaciones se celebraron el viernes por la noche en numerosas localidades vascas, en algunos casos con incidentes.La concentración de ayer, convocada por las gestoras proaministía, se inició a la una de la tarde en el Bulevar donostiarra, muy concurrido a esa hora y dominado por el ambiente festivo de los carnavales. La manifestación recorrió varias calles del centro con gritos de protesta contra las extradiciones y contra el Partido Nacionalista Vasco (PNV), acusado por los participantes de traidor. En la plaza de Guipúzcoa, un grupo volcó un automóvil deportivo de matrícula francesa. Los cristales del vehículo quedaron destrozados.

Varios miles de personas participaron el viernes por noche en manifestaciones contra la entrega a España por las autoridades francesas de exiliados vascos. En Bilbao, los manifestantes recorrieron a última hora de la tarde el Casco Viejo. La Policía Nacional disolvió a un grupo que había volcado un microbús del servicio urbano en la plaza de España. En Pasajes (Guipúzcoa), grupos de manifestantes cerraron al tráfico con barricadas la carretera nacional Madrid-Irún.

Incidentes en Ordizia

Jóvenes que lanzaban gritos contra el Partido Socialista arrojaron bolsas de basura a la Casa del Pueblo de la localidad guipuzcoana de Ordizia. En Usurbil, en esta misma provincia, una parte del vecindario participó en un acto de recibimiento al exiliado José María Arriaga, que fue puesto en libertad después de ser entregado por Francia a las autoridades españolas.

Por otra parte, la comuna de presos de ETA Militar en Herrera de la Mancha (Ciudad Real) ha anunciado en un largo comunicado publicado ayer en el diario Egin que continuará la lucha de los presos vascos.

Los presos reivindican el reagrupamiento en un único centro y el reconocimiento de un régimen interno "adecuado", dice el artículo, "a nuestra condición de presos políticos y a la dignidad, de seres humanos". El texto interpreta que los traslados de grupos reducidos de presos desde Herrera de la Mancha y Alcalá-Meco (Madrid) a otras cuatro prisiones pretende romper su unidad, aislar a los detenidos y presionarles para que acepten la reinserción social.