_
_
_
_
_

Miedo al mal ejemplo

Francisco G. Basterra

La exigencia española de que los aviones de Torrejón abandonen el país es considerada por la parte norteamericana como una práctica expulsión y va mucho más lejos que la reducción sustancial de la que habla Felipe González, dicen medíos norteamericanos. En consecuencia, no es aceptable. "Tendría muy serias implicaciones que pareciera que nos están forzando fuera de España", dijeron las fuentes. Para Washington, lo más negativo del intento del Gobierno socialista es el precedente que crea un mal ejemplo que podrían utilizar en el futuro terceros países.La Administración considera que las fuerzas norteamericanas en España forman parte del conjunto de sus 350.000 hombres desplegados en Europa, cuya presencia es ya objeto de un debate en EE UU. La negociación con España está dentro de ese debate y afectará a su resultado.

Más información
España rechaza la propuesta norteamericana de trasladar a Morón los 72 aviones F-16 estacionados en Torrejón

Washington convierte así a los 72 F-16 de Torrejón en "la mayor fuerza de disuasión occidental en el Mediterráneo y la única de despliegue avanzado". Los analistas del Pentágono dicen que la defensa occidental sufriría una pérdida con su salida de España. "No estamos pensando en ningún país que pueda acoger a la 401 y, además, ¿por qué algún socio de González en la Alianza tendría que hacerlo sólo porque Felipe no quiere estos aviones? En Italia y Portugal ya no cabe más presencia militar estadounidense. Marruecos sería una opción posible, pero es un país inestable, y Grecia y Turquía presentarían también problemas".

Medios norteamericanos próximos a las negociaciones insisten en que España no ha rechazado formalmente la contrapropuesta de Washington, "algunos de cuyos elementos incluso reconoce en privado que son positivos. Nuestra contraoferta es compleja y no pudo ser estudiada a fondo por Felipe González en sólo unas horas, entre dos sesiones negociadoras".

"Nos encontramos en un difícil momento negociador y ahora hay que sintetizar los diferentes puntos de vista. No presentamos un ultimátum y tampoco España lo ha formulado. Es como una paella que hay que hacerla entre los dos, respetando los gustos de ambas partes", afirman funcionarios norteamericanos.

La única flexibilidad que sugiere EE UU en su propuesta consistiría en acelerar los plazos de su salida de Torrejón y redespliegue en Morón.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_