Tumulto en el pasillo

El conflicto de los asientos -provocado por Antonio Hernández Mancha-, su deseo de contestar a Felipe González en los pasillos y la protesta de seis diputados del Grupo Mixto que no podrán subir a la tribuna de oradores hacían prever que el discurso de Felipe González quedara desvirtuado. Esta preocupación parece mitigada tras el fin de semana. No así en lo que respecta al debate bis que, sin duda, se celebrará en los pasillos, protagonizadó por seis diputados del Grupo Mixto excluidos del debate.El presidente del Congreso, Félix Pons, permitirá al senador y presidente de AP, Hernández Mancha, que ocupe el escaño que desee, previsiblemente en la primera fila de los bancos conservadores, y éste ha renunciado a replicar al discurso de González en los pasillos, al menos de manera inmediata. Hernández Mancha dejará que la primera respuesta conservadora sea la del portavoz de su grupo, Arturo García Tizón. Posteriormente convocará a los informadores para opinar sobre la intervención de González. Es previsible que los diputados del Grupo Mixto tendrán que ponerse de acuerdo para las horas de utilización de los pasillos, ante su esperada concurrencia. Los dos diputados de Eusko Alkartasuna, escindidos del PNV, Joseba Azkárraga e Ignacio Oliveri, a quienes no se les dejará ocupar la tribuna de oradores, utilizarán, como Hernández Mancha, esta dependencia de la Cámara para hacer su debate.

Jorge Verstrynge y Carlos Manglano, de Renovación Democrática, escindidos de AP, ocuparán igualmente posiciones en el pasillo. No así los también segregados del partido conservador Gabriel Camuñas y Carlos Ruiz Soto, ahora del Partido Demócrata, que mostrarán su rechazo no asistiendo al debate.