Encierros del personal de enfermería del hospital Primero de Octubre, de Madrid

El personal de enfermería del hospital Primero de Octubre de Madrid realizó ayer un encierro intermitente y por turnos en el salón de actos de dicho centro para pedir la dimisión de la dirección de Enfermería del hospital y como protesta por los nuevos planes que modificarán las condiciones de trabajo del área de enfermería.El encierro fue convocado por el comité de empresa (integrado por representantes de UGT y CC OO) y apoyado por otras fuerzas sindicales como CNT. En el hospital Primero de Octubre trabajan en el área de enfermería aproximadamente 1 200 personas.

El origen de este conflicto se remonta a un documento que hizo llegar hace 20 días la dirección de Enfermería a todo el personal, en el que se anunciaban modificaciones que el comité de empresa considera sustanciales en las condiciones de trabajo.

Según el comité, las nuevas normas implican movilidad del personal del área y cambios de servicio, lo que se traducirá en aumento de jornadas nocturnas y pérdida de días libres.

Tras discutir en asamblea el documento de la dirección y después de mantener conversaciones con los responsables del mismo, los trabajadores de enfermería acordaron pedir la dimisión de la dirección de Enfermería y negociar con el Insalud provincial los puntos del documento.

En este mismo hospital continúa el malestar entre los médicos por las malas condiciones de trabajo. Mañana jueves los facultativos celebrarán una asamblea para analizar la situación y adoptar, en su caso, nuevas medidas de protesta.

Asimismo, los médicos del hospital de la Seguridad Social San Millán, en Logroño, informa Mabel Alberola, incrementarán las medidas de presión iniciadas hace dos semanas en protesta por la actuación del Insalud, al que acusan de realizar una reforma sanitaria autoritaria y sin diálogo. Los médicos han dirigido una carta al ministro de Sanidad exigiendo una investigación sobre la reforma sanitaria en esta comunidad.

El 95% de los facultativos que apoya la protesta ha aceptado la oferta del Insalud de crear un comité de médicos estables que analizaría junto a la Administración las normas ministeriales con carácter retroactivo. No obstante, mantienen la solicitud de dimisión del director gerente Alfredo Macho y del director médico Félix Martínez, a los que hacen responsables de la degradación del centro sanitario y acusan de ejercer chantajes y coacciones sobre los médicos. Las medidas de presión aprobadas por la asamblea incluyen "trabajar sin bata blanca y realizar una huelga de hambre de 24 horas la próxima semana", según el portavoz del comité Fernando Sáez.