La información de bolsa de EL PAÍS, obsoleta
La Información bursátil del periódico es una sección que provoca numerosas quejas de los lectores. Recogemos en esta columna dos protestas concretas que señalan no sólo las deficiencias en cuanto a los datos de las cotizaciones, sino la crítica al comentario diario de la bolsa.Desde Barcelona, el doctor Salvador Rofes nos envía como muestra la página de bolsas españolas del 16 de enero, y señala que una parte de los valores que cotizan en Barcelona y Valencia no está actualizada y puede inducir al lector a cometer graves errores financieros si hace caso de la información. "Los apartados en que esto es más flagrante", subraya el lector, "son siderúrgicas e inversión mobiliaria. Por ejemplo: Forjas Alavesas, Inpisa-Dos y Ahorro Bursátil son valores de cotización casi diaria en Barcelona, mientras EL PAIS los mantiene a frecuencia 0, con una cotización del año pasado que no tiene nada que ver con la real. Para ver que esto es así sólo hay que mirar el Boletin Diario de la Bolsa de Barcelona. Con otros valores de Valencia creo que sucede lo mismo. Igualmente pienso que deberían analizarse los valores escogidos para el listado de Barcelona, ya que faltan algunos de alta frecuencia de cotización y de volumen importante, como Inmobiliaria Colonial. Si el periódico no está en condiciones de dar las cotizaciones diarias de determinados valores debe retirar los mismos de las citadas listas y no inducir a error a los lectores".
En términos parecidos se expresa Manuel Santaella Cruz, quien considera que no se respetan los derechos a una correcta información al no facilitar las cotizaciones de sociedades admitidas recientemente pero que ofrecen un elevado interés, tanto por su frecuencia de contratación como por la necesidad de ampliar el mercado, y pone como ejemplos a Ticsa, Acerinox, Unipapel y Mercapital. Por otra parte, este lector sugiere que el tono críptico con que se redactan los comentarios diarios no es útil para aquellos que no han asistido a la sesión, y propone que EL PAÍS no imite el tono habitual del resto de las publicaciones y cite cuáles fueron los valores que quedaban con dinero al final de la sesión o cuál fue el valor afectado por determinada noticia. Considera que de no ofrecer una información mas completa, útil y menos aséptica, dicha columna puede suprimirse por su falta de utilidad.
El redactor jefe de la sección de Economía, Joaquín Estefanía, está de acuerdo con las quejas, que, según nos indica, él conoce bien, y su respuesta es terminante: "También en la sección recibimos diariamente bastantes cartas preguntando cuándo se van a actualizar las sociedades que cotizan en los mercados de valores. Tradicionalmente hemos cambiado el cuadro de cotizaciones cada año el 1 de enero. Este año hemos tenido, y seguimos teniendo, importantes dificultades técnicas para dicha actualización. Afortunadamente, estos problemas están en vías de arreglo, y podemos comprometemos en firme a que en pocas semanas las bolsas de valores mejorarán sustantivamente su calidad, duplicarán su contenido y se actualizarán permanentemente. Los lectores tienen razón en que las páginas se han quedado obsoletas".
Los hombres de raza negra
Una información publicada en la sección de Internacional el pasado 22 de enero, titulada 12 negros muertos en un ataque perpetrado en un poblado de Suráfrica, ha sido considerada por Milagros Bodas Ortega como "una manera irrespetuosa de dar noticias", y desde Madrid ha escrito al defensor de los lectores para expresar su desagrado. Acusa no sólo a EL PAÍS, sino a otros medios de comunicación, de "ser racistas, sin la menor sensibilidad", y nos plantea estas preguntas: ¿Doce negros qué? ¿Doce perros negros acaso? ¿Doce patos negros? ¿O 12 cerdos negros? Pero qué más da; total, son tantos los negros que mueren que ya deberíamos presuponer de lo que se trata: hombres, mujeres y niños, ¿no es eso?".
La responsable de la sección de Internacional, Mariló Ruiz de Elvira, comprende las razones de la lectora, y le ofrece una explicación coherente: "Nos gustaría hablar simplemente de personas en el caso de Suráfrica, sin distinguir si son blancas o negras, pero la existencia del apartheid nos obliga a destacar la raza de los protagonistas, ya que los negros, siendo mayoría, ni siquiera tienen derecho al voto. Por ello, al igual que hacen todos los periódicos del mundo, hablamos de negros o blancos cuando nos hacemos eco de incidentes en los que la raza o el racismo, como ocurre en este caso, son un elemento fundamental de la noticia. El Diccionario de la Lengua Española afirma, en su segunda acepción: 'Negro: dícese del individuo cuya piel es de color negro".
Direcciones y recomendaciones
Determinados reportajes que aparecen en el periódico suelen ir documentados con direcciones para facilitar al lector la posibilidad de obtener mayor información sobre los temas tratados. Éste es el caso del artículo publicado en la sección de Salud del 16 de noviembre de 1986 bajo el título Operación para eliminar la grasa, referido a la liposucción, operación de cirugía estética que consigue remodelar el contorno corporal, escrito por Ana García Arce. Al final del informe se añadía la direccion de la Asociación Nacional de Esteticistas, así como la de algunos doctores que tratan la enfermedad, y se advertía: entre otros muchos médicos de toda España que la llevan a cabo".
El tema de las direcciones ha hecho reaccionar al presidente de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética, Manuel Tafalla Peña, quien reclama a este periódico que se haga una lista completa de todos los profesionales, centros médicos o ciudades donde se practica dicha intervención, e indudablemente, la fuente de información debe de ser nuestra sociedad".
El subdirector responsable de la edición del domingo, Eduardo San Martín, nos indica que no se trataba de una relación exhaustiva, sino de una recomendación, y por tanto, de una elección entre diferentes ofertas, y añade: "Tal decisión constituye una práctica legítima de todo medio de información, siempre que esa elección no esté determinada por intereses o presiones de grupos económicos o sociales, lo que no es el caso".
Con los mismos razonamientos se expresa la autora del reportaje, Ana García Arce: "El artículo sólo pretende informar acerca de la estética personal, pero, dado que la liposucción es una operación quirúrgica, se citan profesionales reconocidos de esta especialidad y, en último lugar, se hace una mera indicación a la Asociación de Esteticistas".
Para complementar la información, el ombudsman añade ahora la dirección de la. Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética: calle de Santa Isabel, 51. 28012 Madrid.
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