_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

El manifiesto de Leavitt

Acabo de leer en EL PAIS del 31 de enero un artículo de un escritor americano de 24 años llamado David Leavitt y que, hasta el momento, era para mí un perfecto desconocido.Aparte de una tristeza angustiosa, la lectura me ha producido un sentimiento de malestar: yo, sin ser tan moderna como las personas que éI retrata, en cierta forma me encuentro incluida en el grupo que describe. Tengo 28 años, un, trabajo estable y un matrimonio parecidamente estable. No creo estar entre los seres más afortunados de la Tierra, pero tampoco entre los menos. Me siento incapaz de creer en muchas cosas, pero a la vez sé que sólo creyendo ciegamente en una causa utópica se puede llegar a transformar una realidad que, desde muchos enclaves, se nos, representa como la única, y por tanto, la mejor posible. Y me asusto de vivir en un mundo donde la autocomplacencia es un baño de oro sucio que contamina todo lo que cubre. De la angustia vital y culpable hemos pasado a un descreimiento alegre que nos hace creernos ejemplares redivivos de Óscar Wilde sólo porque las grandes palabras de la humanidad nos provocan una sonrisa escéptica y displicente. Pero tamaña falta de autocrítica no impide que siga existiendo un mundo injusto que todos fomentamos por omisión, amparados en la irrebatible excusa de que ya no hay ideología ni solución viable e inmovilizados en el fondo de nuestros corazones por una incapacidad petrificadora para renunciar a la comodidad más insignificante.

Con este sermón moralista no estoy pidiendo una campaña de culpabilización pública, pero al menos no seamos tan cínicos de pensar que vivimos en el mejor de los mundos posibles en cuanto hemos conseguido un medio de vida y alguien a quien amar.- Asunción Urbano de Saleta.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_