Dos supuestos 'etarras', capturados en San Sebastián
Dos presuntos etarras fueron detenidos ayer en San Sebastián como continuación de la operación policial que en la madrugada del pasado viernes permitió la detención en la capital de España de seis supuestos miembros del comando Madrid. Los detenidos son Alejandro Oyarzábal y Pilar Aramburu Quiñones, según informaron fuentes del Ministerio del Interior.El Gobierno Civil de Guipúzcoa precisó que a última hora de ayer ambos detenidos eran trasladados desde San Sebastián a Madrid, después de habérseles aplicado la legislación antiterrorista. Pilar Aramburu Quiñones era propietaria de un chalé situado en el término municipal de Moralzarzal, en la sierra de Madrid, donde ayer la policía intervino una metralleta Ingranm con silenciador, una granada, munición y varios escáner.
La policía obtuvo la pista del chalé tras los interrogatorios que efectuó a uno de los detenidos el viernes en Madrid, que ayer fue llevado por miembros de las fuerzas de seguridad para que indicara el lugar exacto del inmueble.
El chalé se encuentra en la calle de Cerquillón, en el número 4, y ocupa una parcela de unos 1.000 metros cuadrados, doscientos de ellos habitables. El chalé está valorado en unos 18 millones de pesetas, según testimonios de los vecinos, que añadieron que su actual propietaria compró el inmueble en noviembre de 1985.
'Cárcel del pueblo'
En el sótano del chalé se han descubierto unas obras que para la policía eran el inicio de la construcción de una cárcel del pueblo, cuya entrada iba a ser disimulada con una caja fuerte con el fondo falso. La policía ha encontrado herramientas y sacos con tierra en el inmueble.Sin embargo, el padre de Pilar Aramburu, denominado José, negó ayer cualquier relación de ETA con su hija. "Hoy han venido aquí cuatro inspectores", dijo José Aramburu, refiriéndose a su domicilio, "y me han dicho que la habían detenido y que era de Herri Batasuna, lo que no es verdad, aunque sí simpatizaba". "Han registrado la casa y se han llevado alguna cosa", añadió a Efe. Por otra parte, se ha confirmado la identidad de una de las detenidas el viernes en Madrid. La llamada de una mujer el viernes a Euskal Telebista diciendo que era. madre de María Teresa Rojo y asegurando que su hija estaba en libertad en el sur de Francia condujo a que en diversos medios del País Vasco dudaran de que María Teresa Rojo Paniego hubiera sido detenida en el piso de Río Ulla de Madrid. La mujer afirmó a la televisión vasca que había hablado con su hija tres veces durante el viernes pasado y que ésta le aseguró que estaba en libertad.
Interior, por su parte, aseguró que la identidad era la correcta y que se había comprobado con las huellas dactilares. Posteriormente se aclaró que existen dos María Teresa Rojo, una en el sur de Francia y otra actualmente detenida en Madrid. Sus segundos apellidos no coinciden.
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