Sajarov evoca la "tragedia nacional" de Afganistán al regresar a Moscú

El premio nobel de la paz Andrei Sajarov regresó en la mañana de ayer a Moscú, junto a su esposa, Elena Bonner, tras siete años de confinamiento en la ciudad de Gorki. A su llegada a la estación de Yaroslav, en Moscú, Sajarov era esperado por un centenar de periodistas, ante los que expresó su emoción y comentó diversos temas, entre ellos la intervención en Afganistan, a la que calificó de "tragedia nacional". también dijo que no cree que la URSS le autorice a emigrar al extranjero.

La situación en Afganístán constituye, según el disidente soviético Andrei Sajarov, el punto más doloroso de la política exterior soviética. "Se deberían adoptar medidas más decididas que las que se han puesto en marcha hasta el presente para resolver este problema", añadió.El disidente soviético dijo en otro momento que está dispuesto a continuar la lucha para la defensa de los derechos humanos en la Unión Soviética "en la medida de lo posible", y manifestó su preocupación ante la situación de los presos de conciencia que actualmente se hallan en los campos de concentración soviéticos. "Como le dije a Gorbachov por teléfono, hay que adoptar una postura política y de principio acerca de los prisioneros de conciencia", dijo. Añadió que su vuelta del confinamiento sólo constituye "una pequeñez" respecto a lo que se debería hacer en este campo.

Sajarov declaró que le gusta ría reanudar su trabajo en la Academia de las Ciencias de la URSS. Precisó, sin embargo, que a pesar de las entrevistas que recientemente ha mantenido en Gorki con Guri Martchuk, el presidente de dicha institución todavía no ha recibido confirmación sobre su posible reincorporación ni sabe qué tipo de tareas podría serle encomendado en la academia.

En relación con sus planes, para el futuro, Sajarov expresó que todavía no ha decidido si su objetivo es o no emigrar al extranjero, y afirmó que es un tema sobre el que debe reflexionar. No obstante, dijo que no cree que, llegado el momento, las autoridades soviéticas le permitieran llevar a cabo ese eventual deseo.

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