Moscú acusa de complacencia a las autoridades de Kazakistán
Las autoridades de la República de Kazakistán, en el Asia central soviética, donde se desarrollaron manifestaciones de protesta nacionalista el pasado miércoles, fueron acusadas ayer de complacencia por Moscú. Se les ordenó, asimismo, realizar reformas en la calidad de los servicios. Mijail Solomentsev, miembro del Politburó enviado a Kazakistán tras el estallido de la protesta, y el nuevo líder del partido comunista de dicha república, Guenadi Kolbin, presidieron una reunión extraordinaria del Gobierno local, en la que señalaron los graves errores cometidos en la construcción de viviendas, comercio y atención médica.
Las manifestaciones del miércoles en Alma Ata, capital de Kazakistán, se produjeron un día después del nombramiento de KoIbin, un ruso de 59 años, en sustitución del secretario general del partido comunista de dicha república soviética, Dimujamed Kuriaev, de 74 años, natural de Kazakistán, que era el máximo dirigente local desde 1964. Ese día, grupos de manifestantes salieron a la calle, prendieron fuego a un almacén de alimentos y vocaron varios coches.Fuentes diplomáticas en Moscú señalaron que, según informes recibidos de Alma Ata, siete policías murieron durante los incidentes y alrededor de 20 manifestantes resultaron heridos. Los medios de comunicación oficiales de la URSS ha bían afirmado que los disturbios fueron violentos, pero que no hubo muertos.
La agencia Tass, tras señalar que los nacionalistas estaban detrás de las manifestaciones de Alma Ata, informó que Solomentsev y KoIbin visitaron ayer el Instituto de Agricultura de Kazakistán, en el que ordenaron que se mejorara la educación en un sentido "internacionalista, ideológico y moral".
Ambos dirigentes visitaron también la Universidad estatal y un instituto politécnico, en los que se dirigieron a estudiantes y profesores en términos similares. Los estudiantes tuvieron una destacada participación en los disturbios del miércoles.
Tass agregó que en la reunion extraordinaria del Gobierno se dedicó "principal atención a la corrección de los errores cometidos en el desarrollo social y económico de la república".
