Varios Gobiernos africanos implican a Pretoria en la muerte de Machel
Miles de jóvenes negros, que ocuparon ayer las calles de Harare, capital de Zimbabue, obligaron a algunos grupos de blancos a rendir tributo al presidente mozambiqueño, Samora Machel, muerto el domingo al estrellarse su avión, e incendiaron las oficinas de la compañía aérea de Suráfrica, a cuyo Gobierno acusan de haber provocado la muerte del líder negro. Mientras algunos Gobiernos africanos, como los de Zimbabue, Zambia y Argelia, señalan claramente a Pretoria como responsable de un atentado contra el avión en el que viajaba Machel, las autoridades de Mozambique, que han iniciado una investigación, han anunciado a la población que el presidente murió "en un accidente aéreo". El piloto del avión ha dicho que su aparato fue derribado.
Los jovenes negros, en su mayoría estudiantes de la universidad de Zimbabue, gritaron "iViva Samora!" y "¡Ojo por ojo!" y rompieron algunos escaparates y los cristales de varios coches. Intentaron también incendiar las oficinas de la compañía de aviación de Malawi, pero fueron dispersados por la policía, que utlizó gases lacrimógenos y perros adiestrados, informa Erik van Ees desde Johanesburgo.En la capital mozambiqueña, Maputo, el Gobierno declaró dos meses de duelo oficial por el presidente Samora Machel, muerto a los 53 años. Los 16 miembros de una comisión investigadora formada por Mozambique inspeccionaron ayer el lugar montañoso en el que cayó el aparato y recuperaron su caja negra. Los equipos de rescate recogieron los cuerpos de los 34 muertos, entre ellos el ministro de Transportes, Luis Alcántara Santos.
El piloto soviético del avión Tupolev en el que viajaba Machel ha manifestado, según la Prensa surafricana, que cita fuentes oficiales anónimas, que el aparato fue derribado. Otros supervivientes y las autoridades de Pretoria aseguran que el accidente se debió al mal tiempo y a un error del piloto. La agencia de noticias mozambiqueña afirmó que la muerte de Machel "se produjo en circunstancias todavía no esclarecidas".
El piloto, identificado como VIadimir Ndvoselov, fue trasladado ayer a un clínica de Pretoria desde el hospital de Nelspruit, donde fue atendido inicialmente. Según fuentes de este centro presentaba "una condición mental agresiva". Otro de los tripulantes del avión, también soviético, murió en el suceso. Fuentes citadas por la Prensa surafricana añaden que el piloto superviviente se niega a colaborar con las autoridades que llevan la investigación.
Expertos en navegación aseguran, por su parte, que el accidente se debió fundamentalmente a un error humano, ocurrido cuando el piloto, que volaba en medio de una fuerte tormenta, confundió Nelspruit -a unos 50 kilómetros del lugar donde cayó el avión- con Maputo, por una incorrecta interpretación de la carta de navegación.
El presidente de Zambia, Kenneth Kaunda, acusó directamente al Gobierno de Pretoria de estar implicado en la muerta de Machel, según informa desde Lusaka la agencia Reuter. "Les acuso abiertamente de la muerte del presidente Machel mientras no demuestren su inocencia", manifestó Kaunda, quien añadió que su país no aceptará la investigación iniciada por Suráfrica. La agencia oficial argelina APS calificó la muerte del jefe de Estado mozambiqueño como "un crimen premeditado" cometido por África del Sur. El Gobierno de Pretoria no ha respondido a estas acusaciones y se ha limitado a decir que aceptará cualquier tipo de investigación oficial.
La población mozambiqueña, que conoció la noticia de la muerte de su presidente casi 24 horas después del suceso, salió ayer a las calles para homenajear a su líder. El diario Noticias, de Maputo, informó en primera página del accidente con el título de "Samora Machel ha muerto", y una foto del presidente.
Los dirigentes del Frente de Liberación de Mozambique (Frelimo), partido marxista-leninista en el poder, se reunieron ayer de nuevo para buscar un sucesor a Machel, aunque no sse cree que se haga público el nombramiento antes del funeral por el presidente, previsto para comienzos de la próxima semana.
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