Maragall pronunciará ante el COI un discurso contundente, pero humilde en la forma

ENVIADO ESPECIAL El alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, llevará en solitario el peso de las intervenciones orales de la delegación española, que defenderá hoy a las 11.45 Ia candidatura de Barcelona ante los 86 miembros del Comité Olímpico Internacional (COI) que decidirán mañana la sede de los Juegos Olímpicos de Verano de 1992. Maragall pronunciará un discurso preciso yc ontundente en el razonamiento, pero con "tono humilde" en la forma, según sus asesores. El estilo elegido por la candidatura española obedece a un intento de capitalizar el descontento creado entre algunos miembros del COI por las declaraciones prepotentes del promotor de la candidatura de la capital francesa, quien recientemente afirmó que "el COI debería estar agradecido a París por ofrecerse a ser sede de los JJ OO".

La decisión de que Pasqual Maragall lleve el peso de la intervención de Barcelona surgió de diversas entrevistias y sesiones de trabajo realizadas por los asesores del alcalde y que concluyeron en la reunión que, dos semanas antes de viajar a Lausana, se celebró en la finca que la Diputación de Barcelona posee en el Montseny. A esta reunión asistieron, según fuentes consultadas por EL PAÍS, Pasqual Maragall; Josep Miquel Abad, consejero delegado de la candidatura; Jordi Serra, dírector de la Oficina Olímpica; Lluís Millet, encargado de las instaliaciones; y Pedro Palacios,jefe de Prensa y relaciones públicas de la oficina.Las sesiones del Montseny

El fin de semana se repartió en tres largas sesiories. Por la mañana del sábado, los participantes en el cónclave repasaron y estudiaron todos los papeles de la candidatura y el dossier presentado al COI. Por la tarde, los asistentes pusieron sobre la mesa toda clase de ideas y sugerencias para sorrieterlas posteriormente a estudio -cualquier idea expuesta, por dispar que fuera, quedó anotada-.

Los asistentes habían mantenido entrevistas con expertos en comunicación, tras las cuales surgió el convencimiento de que Maragall -que domina a la perfección el inglés- debía copar los casi 25 minutos de exposición concedidos a cada candidatura. Se decidió, además, que Maragall debía realizar un discurso preciso y contundente, y se descartó la intervención de las otras personas de la delegación, "porque seis intervenciones dificultarían el mensaje y la concreción de la oferta".

Esos mismos expertos recomendaron que si la ciudad candidata poseía una persona con carísma, conocida por el auditorío, con dominio de uno de los idiomas del COI -inglés o francés- y dominador del dossier, debía apostar por él y elegirlo como portavoz.

El discurso que pronunciará hoy Maragall será emotivo en el fondo, pero no en la forma, según han informado a este diario fuentes próximas al alcalde. "Se trata de pedir la organización de los juegos con humildad, creyendo que tenemos la razón", explican los asesores de Maragall. Se intentará evitar la altanería de la que se acusa a algunos miembros de la carididatura de París. El máximo ejecutivo del grupo promotor de la candidatura de la capital francesa, Alain Danet, ha declarado que el COI "debería estar agradecido a París porque nos ofrecemos para albergar los juegos".

Maragall destacará de nuevo las razones por las que Barcelona solicita ser sede en 1992, que son, entre otras, las siguientes: la ciudad ha pedido los juegos cinco veces; cuenta con el apoyo unánime de todas las instituciones; tiene acabado el 88% de las instalaciones; está preparada para el turismo; y España es un país que vive intensamente el deporte. Maragall también apelará al principio de la extensión e irlternacionalidad de los juegos, que figura en la Carta Olímpica, para recordar que España es el único gran país de Europa occidental que no ha organizado un evento olímpico.

Durante la sesión del Montseny también se preparó el posible debate que puede seguir a la exposición del alcalde. Tras repasar las actas de la sesión de Baden-Baden de 1981, en la que la capital surcoreana, Seúl, derrotó a Nagoya (Japón), se hizo una selección de posibles preguntas a realizar por miembros del COI. Se prepararon unas 100 respuestas a temas como, por ejemplo, la localización de la vela, deporte que figura con dos posibles escenario: Palma de Mallorca y Barcelona.

"La entrevista", apuntó ayer una persona muy próxima a Maragall, "no es definitiva, pero en ella pueden perderse puntos. Se trata de no fallar, de consolidar nuestra posición".