La oposición considera ridículo el secreto en la sesión parlamentaria

J. G. I Varios grupos de la oposición coincidieron ayer en considerar absurdo que el Gobierno imponga un carácter secreto a las intervenciones que sobre el contenido del memorándum entregado por el Gabinete a la OTAN, con las condiciones de la pertenencia española a la Alianza Atlántica, llevarán a cabo esta tarde, ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados, el ministro de Defensa, Narcís Serra, y el de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez.

Los portavoces del Partido Demócrata Popular (PDP), Centro Democrático y Social (CDS) e Izquierda Unida (IU) agregaron que la reserva impuesta a la reunión resulta ridícula si el documento al que se van a referir los representantes gubernamentales es el publicado ayer por la revista Interviú. Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, de Coalición Popular, renunció a formular un comentario sobre cualquier aspecto de esta cuestión.

El presidente del Congreso, Félix Pons, tras advertir que desconocía si la información penodística refleja exacta y plenamente el informe oficial, atribuyó al Gobierno la potestad de mantener o no el carácter secreto de las explicaciones que den hoy los ministros de Defensa y Asuntos Exteriores.

Según fuentes de la oficina del portavoz del Gobierno, éste mantenía ayer su exigencia de confidencialidad para la comparecencia parlamentaria de sus representantes, ya que el memorandum presentado a la OTAN sobre la adhesión de España "no es el publicado ayer como 'el memorándum secreto', dividido en 12 puntos".

Pons anunció que para finales de esta semana o principios de la próxima ofrecerá su interpretación del reglamento de la Cárnara, como le había encargado la Junta de Portavoces, para regular unos mecanismos concretos por los que el Parlamento pueda en el futuro tener conocimiento de documentos secretos.

El portavoz del PDP en la Comisión de Asuntos Exteriores, Javier Ruperez, preciso ayer que su partido abandonará la reunión "sólo en el caso de que el Gobierno se niegue a poner a disposición de los portavoces parlamentarios" el memorándum.