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Un Magistrado de Bilbao y la juez del 'caso Linaza' piden escolta policial tras recibir amenazas de muerte

El magistrado presidente de la Sala Segunda de lo Penal de la Audiencia de Bilbao, Juan AIberto Belloch, 37 la juez María Elisabeth Huerta, titular del Juzgado de Instrucción número 3 de la misma ciudad, cuentan desde ayer con escolta policial tras recibir ambos amenazas de muerte, acusados, entre otras cosas, de entorpecer la labor de los cuerpos de seguridad en la lucha contra el terrorismo. Belloch, portavoz de la asociación Jueces para la Democracia, declaró ayer que el hecho coincide con una gran campaña de presión sobre los jueces del País Vasco a propósito de la orden gubernamental para que no comparecieran 90 guardias civiles citados en rueda de reconocimiento ante el Juzgado de Instrucción número 3 en el sumario por torturas a Tomás Linaza.

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Las amenazas, a las que medios judiciales y policiales han concedido mayor verosimilitud que a los anónimos habitualmente recibidos por jueces y políticos del País Vasco, llegaron a manos de la juez Huerta y el magistrado Belloch por correo el Sábado y el lunes pasados, respectivamente. En ambos casos se trata de sobres remitidos desde la República Federal de Alemania el pasado 29 de septiembre, según puede apreciarse en el matasellos.Los textos, firmados con las siglas CRUN -hasta ahora desconocidas-, contienen dos párrafos idénticos en los que, tras describir con precísión los cargos que ocupan los destinatarios, se les comunica que están "condenados a muerte", y se enumeran los "delitos" de los que son acusados: "alta traición a la patria, colaboración con bandas armadas de mafiosos y malhechores, protección a asesinos, calumniar e injuriar a las fuerzas de seguridad del Estado y entorpecer la labor de los cuerpos de policía en la lucha contra el terrorismo".

La carta recibida por Belloch enumera a continuación diversos sistemas de ejecución, y advierte: "A partir de ahora, la muerte le acecha por todas, partes". También pide al destinatario que comunique "a su compañero de viaje Montero (Txema Montero es el abogado que ejerce la acusación particular en el caso Linaza) que él también puede hacer el testamento". A, la misiva le acompaña una fotocopia de la portada de un semanario en el que puede -verse a un guardia civil esposado y custodiado por idos encapuchados con metralleta y un titular que dice: "El terror legal de ETA. Asesinos convertiidos en fiscales".

Belloch declaró ayer que las cartas difieren del estilo zafio y repleto de insultos de los anónimos habituales. Por este motivo comentaron las amenazas con algunos compañeros, que coincidieron en señalar su verosimilitud y la gravedad de su contenido, y decidieron solicitar protección policial.

"Puedo imaginarme cuál es el objetivo de este tipo de amenazas", explicó el magistrado. "Pretenden intimidarnos hasta conseguir que nos vayamos del País Vasco. Yo, desde luego, no pienso abandonar, porque todo esto me reafirma en la profunda convicción de que hacemos falta aquí". Juan Alberto Belloch pidió el traslado voluntario a Euskadi hace cinco años y medio. María Elisabeth Huerta, a la que ayer por la tarde no fue posible localizar, también se encuentra voluntaria en el País Vasco, al no haber participado en ninguno de los concursos de traslado que le podían haber permitido abandonar el juzgado del que es titular.

El portavoz de Jueces para la Democracia subrayó que las amenazas de muerte tratan de ejercer presión sobre todos los jueces del, País Vasco, aunque se haya optado por dirigirlas a dos, personas representativas de su medio profesional.

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