El Vaticano condena al teólogo Schillebeeck por sus tesis sobre el sacerdocio
La Congregación para la Doctrina de la Fe, ex Santo Oficio, que preside el cardenal Joseph Ratzinger, condenó ayer las tesis del teólogo nacido en Amberes Edward Schillebeeck, de 73 años, por las ideas vertidas en sus obras sobre el sacerdocio en la Iglesia. El Vaticano criticó las tesis del teólogo dominico en obras anteriores y considera que no ha rectificado en su último libro. La nota, suscrita por Ratzinger y aprobada por el Papa, afirma que la obra de Schillebeeck "permanece en desacuerdo con la enseñanza de la Iglesia sobre puntos importantes".
Los problemas de Schillebeeck con el Vaticano se remontan a 1980, cuando enseñaba en la universidad de Nimega y se publicaron en Holanda dos obras suyas. El dominico, uno de los autores del polémico Catecismo holandés afirmaba en ellas que existen excepciones posibles a la via ordinaria para acceder al sacerdocio y sostenía "la posibilidad dogmática" de un ministerio extraordinario de la eucaristía, en el sentido de que la comunidad cristiana privada de sacerdotes podría escoger en su seno un presidente. Ese cargo electo, por este mismo hecho estaría plenamente habilitado para dirigir la vida de la comunidad y, por tanto, consagrar sin haber recibido el orden sacerdotal.El 13 de junio de 1984, la Congregación para la Doctrina de la Fe envió al teólogo holandés una carta titulada Sacerdotium ministeriale en la que se ponía de relieve que las posiciones desarrolladas en sus dos ensayos no eran conciliables con la enseñanza de la Iglesia sobre el sacerdocio ministerial, y que su concepción del "ministerio extraordinario" no podía ser considerada una "cuestión libre" o susceptible de investigación teológica, por lo que le pedía que aceptase en este punto la doctrina de la Iglesia, "manifestando su adhesión personal al contenido de la carta Sacerdotium ministeriale".
Schillebeeck anunció, cuatro meses después, la publicación de un nuevo libro sobre el asunto, y aseguró que en él no habría contradicción con la Sacerdotium Ministeriale, que jamás se había hablado de un "ministerio extraordinario" de la eucaristía y que el tema de la sucesión apostólica se trataría con mayor amplitud.
El Vaticano, tras examinar el nuevo libro, considera que aunque "la cuestión del ministro extraordinario de la eucaristía no se trata", no hay "rechazo formal a la carta Sacerdotium ministeriale, tampoco se observa "una declaración de adhesión a la misma", sino más bien un "análisis crítico".
