Siete municipales de Viladecans, heridos durante un tumulto vecinal

Un total de nueve personas, siete de ellas agentes de la Guardia Urbana de Viladecans (Baix Llobregat), resultaron heridas de diversa consideración en la noche del pasado miércoles a consecuencia de un enfrentamiento multitudinario que duró más de siete horas.El conflicto se originó al oponerse un grupo de más de 200 vecinos, arengados por el ex alcalde Miguel García Fenosa, a que la grúa municipal retirase un vehículo que obstaculizaba la circulación. Ante la gravedad de los enfrentamientos, en los que resultaron destrozados cuatro coches patrulla de la Guardia Urbana., el alcalde de Viladecans, el socialista, Jaume Montfort, dictó ayer un bando en el que manifiesta su apoyo a la acción de los agentes y hace un llamamiento a la calma a los vecinos.

El Ayuntamiento presentó ayer una denuncia en la comisaría de Viladecans por "agresiones a la piolicía local", contra cuatro personas a las que considera "cabecillas" de la acción. Asimismo, el consistorio presentó una denuncia contra el ex alcalde y actual concejal independiente, Miguel García Fenosa (expulsado del PSC), por "incitación a la alteración del órden público".

Fuentes de la alcaldía aseguraron ayer a este diario que "el Ayuntamiento no descarta la posibilidad de abrir un expediente administrativo contra García Fenosa, ante sus repetidas intervenciones en cualquier problema de la ciudad, y que consisten siempre en orientar a los vecinos hacia la desobediencia civil".

El conflicto se originó alrededor de las 20 horas del miércoles, cuando la grúa municipal intentó retirar un coche aparcado en una acera. Un grupo de personas, que en aquellos momentos ocupaba las terrazas de los bares próximos, se opuso. Cuatro de estas personas bloquearon con sus propios vehículos al camión grúa.

En pocos instantes, los agentes fueron rodeados por más de 200 personas que les retuvieron por espacio de casi dos horas, en las que se intercambiaron todo tipo de insultos y amenazas. Fue entonces cuando el ex alcalde García Fenosa hizo acto de presencia, acompañado de un grupo de amigos, y "en actitud provocadora incitó a los presentes contra los funcionarios y reclamó y criticó la ausencia de Jaume Montfort y de los concejales socialistas", según explicaron algunos de los agentes que participaron en el altercado.

En ese momento, un grupo de vecinos decidió cortar el tráfico de la carretera C-245 por espacio de unos veinte minutos. Al tener conocimiento de estos hechos, el alcalde solicitó la intervención de la Policía Nacional. Con su llegada, los manifestantes desistieron momentáneamente de su actitud.

Sin embargo, una vez que los 30 policías nacionales abandonaron el lugar, los vecinos agredieron a los 24 agentes municipales que se habían concentrado en el lugar, a los que golperaron y lanzaron piedras, además de golpear los vehículos policiales con palos y romper sus cristales. A consecuencia de las pedradas, siete agentes sufrieron heridas, que en algunos casos precisaron hasta siete puntos de sutura en la cabeza.