Gobierno tiene previsto nombrar hoy delegados en Ceuta, Melilla y Castilla y León

El Consejo de Ministros tiene previsto aprobar hoy el nombramiento de varios gobernadores civiles y delegados del Gobierno. La reestructuración afectará a los máximos representantes gubernamentales en Ceuta, Melilla, La Coruña, Orense y Pontevedra. El Consejo probablemente designará, por primera vez en cuatro años, un delegado del Gobierno en la comunidad autónoma de Castilla y León y convertirá al actual jefe de seguridad de la Presidencia del Gobierno, el comisario Manuel Céspedes, amigo personal de Felipe González, en delegado del Gobierno en Melilla, según fuentes gubernamentales.

La reunión del Gabinete estará dedicada en su mayor parte a continuar la preparación de los Presupuestos Generales del Estado para 1987, cuyo proyecto de Ley debe estar en las Cortes antes del 1 de octubre.No obstante, el aspecto más relevante políticamente, según los preparativos que trascendieron ayer, será el del cese del secretario general de la Seguridad Social, Luis García de Blas, y los relevos propuestos por el Ministerio del Interior para nombrar nuevos gobernadores civiles y delegados del Gobierno. La mayoría de los cambios consistirían en traslados a otras provincias y comunidades autónomas de quienes ya ostentan una representación gubernamental.

En caso de que el Consejo decida realizar hoy los nombramientos propuestos por Interior, Domingo Ferreiro será nombrado delegado del Gobierno en Castilla y León, con sede en Valladolid. Durante toda la anterior legislatura esta comunidad autónoma permaneció sin delegado gubernamental. Algunas de las funciones propias de este cargo han sido desempeñadas por un hombre de confianza de Gregorio Peces-Barba, el gobernador civil de la provincia, Juan Eugenio Picón, quien sin embargo no ha llegado a contar con el consenso suficiente para ser designado máximo representante gubernamental en la región, según algunas fuentes socialistas. El sustituto de Domingo Ferreiro en el Gobierno Civil de La Coruña será, muy probablemente, el delegado del Gobierno en Melilla, Andrés Moreno Aguilar, uno de los representantes del Ejecutivo que mayor desgaste político ha sufrido durante su gestión, como consecuencia de los enfrentamientos en su ciudad entre los colectivos cristiano y musulmán. El delegado en Ceuta, Manuel Peláez, será posiblemente nombrado gobernador civil de Pontevedra. Este puesto se encontraba vacante desde que el pasado día 1 el Consejo de Minístros designó a su titular, Virginio Fuentes, gobernador civil de Alicante. Destacados dirigentes del PSOE de Galicia presionaron ayer en favor de que fueran otros los nombrados.

Dos ascensos llamativos son los de Francisco González, alcalde de Parla -localidad del área metropolitana de Madrid situada al suroeste de la capital que será nombrado gobernador civil de Orense, y el de Manuel Céspedes, jefe de seguridad de la Presidencia del Gobierno, quien será promovido a delegado del Gobierno en Melilla. Céspedes, especialista en delitos relacionados con tráfico de estupefacientes así como en servicio de escolta, es amigo personal de Felipe González a raíz de su trato profesional con el presidente del Gobierno.

Nacido en Melilla, Céspedes ya estuvo destinado en esta ciudad como miembro del Cuerpo Superior de Policía. Su labor es recordada sin ningún agrado por destacados representantes del colectivo musulmán. Incluso en los últimos días, cuando fue conocida entre los musulmanes su candidatura para la Delegación del Gobierno, dichos dirigentes acogieron con incredulidad y rechazo tal posibilidad.

El Consejo de Ministros destituirá muy probablemente al secretario general de la Seguridad Social, Luis García de Blas. Nombrado en diciembre de 1982, García de Blas dirigió la reforma de la Seguridad Social y la reforma de las pensiones, cuestión que provocó uno de los enfrentamientos más duros entre el Gobierno y la UGT. José Fernández Noriega, viceconsejero de Salud de la Comunidad autónoma de Madrid, será nombrado director del gabinete del ministro de Sanidad.