Extremadura

Si en alguna comunidad autónoma hay razones para que todos los partidos estén satisfechos del resultado de los pasados comicios, esta comunidad autónoma es Extremadura. En efecto, si comparamos lo ocurrido ahora con las elecciones de 1982, tanto el PSOE como Coalición Popular (CP) como el Centro Democrático y Social (CDS) como Izquierda Unida (IU) ganan votos y amplían su porcentaje sobre el censo, es decir, crecen más que el puro incremento vegetativo debido al aumento de aquél.Otro motivo de satisfacción es que la abstención se ha situado muy por debajo de la media nacional, casi al mismo nivel de la que tuvo en 1982 en esta comunidad.

Es ésta, pues, una de las pocas comunidades autónomas en que el PSOE consigue más votos que en 1982, concretamente un 7,8% más; CP, un 20,7% más; el CDS, un 437%, e IU, un 24,6% más. Para poner las cosas en su sitio, diremos que la Unión de Centro Democrático (UCD) tuvo en 1982 más votos de los que hoy ha obtenido el CDS. Pero, aunque aquella cantera centrista se hubiera dispersado entre el partido de Suárez y el de Fraga, aún habrían tenido éstos más votos del nuevo censo, lo mismo que el PSOE e IU.

La alegría de algunos, sin embargo, será menor a tenor de las esperanzas que pudieron abrirse en las elecciones autonómicas de 1983. Entonces el PSOE sufrió pérdidas considerables de votos y subieron, sin embargo, notablemente CP y el PCE. Pues bien, respecto a esas elecciones, estos dos partidos han perdido ahora votos: CP, el 4,6% de los que obtuvo entonces, e IU, el 36% de los que consiguió entonces el PCE, ganándolos, sin embargo, como es obvio, el PSOE. El CDS se hundió en las autonómicas de 1983 debido al surgimiento con fuerza de Extremadura Unida, que consiguió entonces casi tantos votos como ahora el CDS y que ha invertido ahora los papeles con el partido de Suárez.

Pero veamos cómo se concentra esta situación en cada una de las dos provincias que componen la comunidad. La fuerza del PSOE ha sido y es siempre mayor en la provincia de Badajoz que en la de Cáceres; lo contrario ocurre en el caso de CP. Sin embargo, el crecimiento del PSOE ha sido mayor, entre 1982 y 1986, en Cáceres que en Badajoz.

IU, como ayer el PCE, obtiene sus mejores resultados en Badajoz. Lo mismo ha ocurrido en las recientes elecciones con el CDS, aunque ello obedece, sin duda, a que Extremadura Unida ha obtenido un porcentaje apreciable en Cáceres, el 5,2%, y no así en Badajoz, el 1%.

Extremadura sólo cuenta con dos municipios de más de 50.000 habitantes: las dos capitales de provincia. En las dos, el PSOE siempre ha obtenido porcentajes inferiores a su media provincial y, además, en ambas ha sacado menos votos en 1986 que en 1982. Por tanto, en las dos capitales, el PSOE ha podido perder votos en beneficio de IU, pero más que nada del CDS, que ha obtenido en ambas ciudades mejores resultados que en los conjuntos provinciales. Por tanto, el PSOE ha visto aumentar sus votos entre los nuevos votantes de los municipios más rurales tanto de Badajoz como de Cáceres.

CP, por su parte, ha mantenido prácticamente los mismos votos en ambas capitales entre 1982 y 1986. Su mayor crecimiento, por tanto, también se ha hecho al margen de las dos grandes ciudades.

Para IU su fuerza es superior en las zonas agrarias de Badajoz que en la capital. En Cáceres, su fuerza en la capital es equiparable a la del resto de la provincia.