El Gobierno no hizo gestiones para retrasar la deportación

El Gobierno español no hizo ninguna gestión para retrasar la expulsión a Gabón de Txomin Iturbe, según aseguró a EL PAÍS un alto funcionario del ministerio francés encargado de la seguridad. "La decisión de expulsar a un extranjero de nuestro territorio corresponde soberanamente a las autoridades francesas, pero puedo asegurar que no recibimos ninguna consulta de ese tipo por parte del Gobierno de Madrid ni de ninguna otra autoridad española", añadió.Medios gubernamentales negaron la posibilidad de que existiera un malentendido entre París y Madrid. "Si hubiera existido una mala interpretación, el tema se hubiera planteado durante la entrevista que celebraron en Madrid el ministro francés Robert Pandraud y José Barrionuevo, y ni siquiera se pronunció el nombre de Txomin", explicaron.

Las mismas fuentes niegan que el Gobierno autónomo vasco mantuviera contactos con el Gobierno de París en un intento de posponer la expulsión o de conseguir que Iturbe Abasolo fuera enviado a Bélgica, y no a Gabón. Existe, sin embargo, la posibilidad de que se celebraran contactos políticos, es decir, entre personalidades del PNV y de los partidos que integran la nueva mayoría francesa, RPR y UDF.

La impresión más extendida en París es que el.Gobierno francés no habría hecho nada que pusiera en peligro unas eventuales conversaciones entre las autoridades españolas y ETA, y menos aún actuando por propia iniciativa. Tradicionalmente, París mantiene que el problema vasco es estrictamente español, y debe ser solucionado por sus protagonistas, sin injerencia exterior. El giro que se ha producido en los últimos meses no invalida ese análisis. "El tema vasco es un asunto español, pero el terrorismo es asunto de todos", aseguran medios oficiales. Según han dicho numerosas veces fuentes gubernamentales, España dispone de una de las constituciones más liberales de Europa, lo que quita toda justificación a la violencia.

La postura del Gobierno francés se basa en tres puntos: cooperar estrechamente con las autoridades españolas en la lucha contra el terrorismo, exigir con firmeza la desarticulación de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL), que han actuado en el sur de Francia, y alentar las iniciativas políticas del Gobierno de Madrid para resolver el conflicto. Por eso resultaría extraño que París hubiera decidido la expulsión contra el parecer del Gobierno español.

Los portavoces del ministerio encargado de la seguridad afirman que Iturbe fue detenido "en el mismo momento en el que la policía francesa pudo localizarle". Otros medios oficiosos resaltan que su detención se produjo inmediatamente después del atentado de ETA que causó la muerte de 12 guardias civiles en Madrid, lo que no puede ser una coincidencia. Iturbe permaneció encarcelado en Francia casi dos meses, tiempo suficiente, según dichos medios, como para que el Gobierno español planteara la necesidad de posponer su expulsión. "Si finalmente fue enviado a Gabón, fue con el conocimiento y, al menos, la inactividad del Gobierno español", aseguraron.